“Este lugar no es de poder, es un mandato de servicio. Acuérdense, nos tocan cinco años de servicio y no de poder”, afirmó el Jefe de Estado.
“Dios, familia y patria”: con esta frase Rodrigo Paz Pereira juró como presidente constitucional de Bolivia. En su discurso, instó a respetar todos los símbolos que representan la diversidad del país, sobre todo la tricolor y el escudo nacional.
“Es un gran día para Bolivia”, expresó Paz Pereira mediante un video, acompañado de su esposa, María Elena Urquidi, antes de dirigirse a la plaza Murillo, donde un centenar de ciudadanos, delegaciones internacionales, resguardo policial, militar e invitados especiales lo esperaban para presenciar su juramento como presidente de Bolivia.
Al llegar a la plaza Murillo sonó la marcha Talacocha y una lluvia lo cobijó, algo que el nuevo mandatario agradeció, porque indica, también, que es un “nuevo tiempo”.
“Asumimos la presidencia y el destino de la patria junto a Edmand con una gran responsabilidad. Este lugar no es de poder, es un mandato de servicio. Acuérdense, nos tocan cinco años de servicio y no de poder”, expresó en el Hemiciclo de la Asamblea Legislativa.
En el momento de su juramento, Paz Pereira expresó: “Dios, familia y patria: Sí juro”. El presidente recibió emblemas de alto valor histórico, como la Banda Presidencial con los colores de la tricolor nacional, la Medalla del Libertador Simón Bolívar y el Bastón de Mando, insignias que representan la soberanía del Estado boliviano y que fueron entregadas por el vicepresidente Edmand Lara.
También recibió los bastones de mando policial y otros emblemas representativos. Dio una vuelta por la plaza Murillo, y en la Catedral Metropolitana recibió la bendición por parte del monseñor Jesús Juárez.
PAZ PEREIRA, PRESIDENTE 68
Paz Pereira es el presidente número 68 de la historia de Bolivia. Asumió el cargo en medio del desafío de reconducir el país y la esperanza que tienen los bolivianos de que vengan tiempos mejores.
El nuevo Jefe de Estado, que ganó el histórico balotaje con un 55% de apoyo, expresó su agradecimiento y su emoción por conducir Bolivia, ante más de 70 delegaciones e invitados especiales, además del pueblo que espectó a través de sus televisores, radios y redes sociales la transmisión de mando.
“Bolivia decidió despertar y lo hizo de pie, lo hizo en paz, con el arma más poderosa que existe, el voto y la democracia; el voto y la democracia”, sostuvo el mandatario, quien destacó la transparencia del proceso electoral llevado adelante por el Tribunal Supremo Electoral (TSE).
En las calles, la gente bendijo a Paz y a Lara: “Dios los proteja y guíe a nuestro país correctamente como nos prometió”.
AEP
