El vicepresidente Edmand Lara pidió disculpas a su familia y acusó al gobierno saliente de obstaculizar su ingreso al acto oficial.
En un inicio de gestión cargado de emoción y tensión, el nuevo vicepresidente del Estado, Edmand Lara Montaño, rompió el protocolo durante su discurso de posesión en la Asamblea Legislativa Plurinacional y denunció que el gobierno saliente de Luis Arce habría obstaculizado el ingreso de sus familiares al acto oficial.
“Quiero pedir disculpas a mi familia, porque hoy no tienen un espacio para sentarse con los demás invitados. El gobierno de Luis Arce no deja la maldad, han escondido las manillas y ninguno de mis familiares se ha podido sentar”, expresó con la voz entrecortada, visiblemente afectado.
Según explicó, varios de sus familiares, entre ellos adultos mayores, no lograron ingresar al hemiciclo ni al acto central. “Algunos están parados y otros se están mojando afuera (...) pero bueno, no importa, hay que aprender a perdonar también”, añadió antes de recibir aplausos de los asistentes.
Durante su intervención, Lara también dirigió un mensaje directo al exmandatario: “A Arce, que Dios lo perdone por todo el daño que ha hecho y que sigue haciendo”, dijo, en un momento que combinó emoción, reproche y un llamado al perdón.
RESTRICCIONES A LA PRENSA
El acceso a la plaza Murillo también estuvo restringido para periodistas debido al dispositivo de seguridad dispuesto por la Policía Boliviana en torno al acto de transmisión de mando presidencial.
Desde la medianoche del sábado 8 de noviembre, se establecieron anillos de control que impidieron el ingreso de personas no acreditadas, incluidos trabajadores de la prensa, hasta la conclusión del evento. Varios reporteros denunciaron dificultades para cumplir con su labor informativa debido al exceso de restricciones.
AEP



