El proyecto busca fortalecer la producción, transformación y consumo de leche con un enfoque social, técnico y sostenible.
La Cámara de Diputados aprobó ayer miércoles, en su 176 sesión, el Proyecto de Ley N° 528/2024-2025 de Fomento y Desarrollo del Complejo Productivo Lácteo, una normativa que promete transformar la cadena láctea en Bolivia.
La iniciativa contempla mecanismos de financiamiento, asistencia técnica y políticas públicas destinadas a consolidar el sistema productivo de la leche en el país.
Tras su aprobación, el proyecto fue remitido a la Cámara de Senadores para su análisis y eventual sanción.
Uno de los pilares fundamentales de esta propuesta es la creación del Fondo Productivo Lácteo ‘Leche para Crecer’, que estará bajo la administración de PRO-Bolivia, entidad pública desconcentrada del Estado.
Este fondo financiará programas orientados a mejorar las condiciones de producción, industrialización y comercialización de la leche a nivel nacional, con la priorización de productores comunitarios, cooperativas y asociaciones rurales.
La nueva propuesta normativa no solo apunta al fortalecimiento económico del sector, sino también al bienestar social de miles de familias productoras. Además del apoyo técnico y eco-nómico, se promoverá la innovación tecnológica, la capacitación especializada y el acompaña-miento a lo largo de toda la cadena productiva, con un enfoque de desarrollo inclusivo y sostenible.
Otro eje central de la normativa es el incentivo al consumo interno de leche y sus derivados, especialmente entre los sectores más vulnerables de la población. Esta estrategia busca mejo-rar los niveles de nutrición en el país, promover hábitos de alimentación saludables y contribuir al desarrollo de una economía familiar rural más sólida, avanzando hacia la soberanía alimentaria.
Para financiar el fondo ‘Leche para Crecer’ se utilizarán recursos provenientes del Programa de Retención por Comercialización e Importación de Bebidas Alcohólicas (RCIBA). Este mecanismo implica un aporte económico por parte de los productores e importadores de bebidas alcohólicas, reorientando esos recursos hacia el sector lácteo con fines productivos y sociales.
La aprobación de este proyecto representa un paso significativo hacia un modelo de desarrollo agroalimentario más equitativo en Bolivia. De ser aprobado en el Senado, se espera que la normativa tenga un impacto directo en miles de familias campesinas, a la vez que garantiza el acceso a productos nutritivos para la población, bajo un esquema de redistribución justa de recursos que fortalezca la producción nacional.
AEP