La Fiscalía solicitó su detención por la gravedad de sus declaraciones, las cuales generaron preocupación a la población.
La dirigente del extinto partido PAN-BOL, Ruth Nina, fue enviada ayer con detención preventiva por 90 días a la cárcel de mujeres de San Sebastián, en Cochabamba, luego de sus polémicas declaraciones sobre las elecciones del 17 de agosto.
Luego de la audiencia cautelar que se desarrolló de manera virtual en instalaciones de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de la ciudad de Cochabamba, la determinación fue tomada por el Juzgado Público Mixto Civil y Comercial de Familia, Niñez y Adolescencia en Instrucción Penal Número 1 de la localidad de Shinahota.
La aprehensión de Nina fue el pasado jueves, luego de presentar su declaración en la Fiscalía de Cochabamba. Esa instancia solicitó la detención preventiva, argumentando la gravedad de sus declaraciones, las cuales generaron preocupación por la incitación a la violencia en el contexto electoral.
Lección
En una anterior oportunidad, el ministro de Gobierno, Roberto Ríos, aseguró que Nina dio una lección a Evo Morales al presentarse a declarar por las polémicas declaraciones que dio en el trópico.
“Reconocer que la señora Ruth Nina se haya presentado ante la justicia, ante esta convocatoria que se emitió por la autoridad competente, es una lección más al señor Evo Morales de cómo se debe acudir de manera respetuosa ante estas instancias”, señaló la autoridad a la prensa.
Indicó que la población siguió de cerca estas declaraciones, las cuales fueron rechazas, razón por la cual el Ministerio Público comenzó la investigación.
La líder del extinto partido PAN-BOL, el 12 de julio, en un ampliado político que se realizó en Lauca Ñ, indicó que “en vez de contar votos, van a contar muertos” en las elecciones presidenciales.
El ministro lamentó que luego de expresar esas palabras, se trató de desinformar a la población y responsabilizar a otras instancias, como a los medios de comunicación, indicando que malinterpretaron lo expresado por Nina.
Ríos señaló que corresponde al sistema judicial determinar las medidas que se adoptarán en este caso; sin embargo, reiteró que se espera sentar un precedente que desincentive discursos de odio y amenazas en contextos electorales.
Morales tiene una orden de aprehensión en su contra por presunta trata de personas y fue convocado por la Fiscalía, pero no se presentó.
AEP