La inocuidad alimentaria se consolida como un derecho fundamental para la salud de la población boliviana.
En un acto que reunió a representantes de los nueve servicios departamentales de salud (Sedes), la ministra de Salud y Deportes, María Renée Castro, presentó este viernes la Norma Nacional de Enfermedades Transmitidas por Alimentos e Inocuidad Alimentaria, un documento técnico que fija directrices para la prevención, vigilancia, control y promoción de la salud en este ámbito.
“Lo ideal sería contar siempre con una buena alimentación; sin embargo, lo que consumimos puede convertirse en un problema si no seguimos los lineamientos establecidos en la normativa vigente. Por ello, celebro que hoy contemos finalmente con esta norma, que fortalece nuestro compromiso con la salud y la seguridad alimentaria”, señaló Castro.
Entre 2016 y 2024, Bolivia registró 87.251 casos de intoxicaciones asociadas a Enfermedades Transmitidas por Alimentos (ETA). Los más afectados fueron niñas y niños de uno a cuatro años (19,6%), jóvenes de 20 a 39 años (19,5%) y menores de cinco a nueve años (18%). Aunque la letalidad fue baja (0,0001%), las cifras reflejan la necesidad urgente de fortalecer la prevención y proteger a los sectores más vulnerables.
La normativa también refuerza el trabajo del Programa de ETA, que analiza productos de alto consumo como embutidos, pollo, panetones, tortas y bebidas alcohólicas, además de supervisar laboratorios y capacitar a manipuladores de alimentos, especialmente en eventos masivos.
“Este avance es fruto del esfuerzo colectivo de nuestros equipos técnicos y representa una herramienta fundamental para la protección de la salud de la población boliviana. Entre todos nosotros, cuando ponemos la salud por delante, sí estamos construyendo salud”, recalcó la ministra.
Con la implementación de esta norma, el país unificará criterios para mejorar la respuesta ante emergencias sanitarias, evitando gastos médicos innecesarios y garantizando que los alimentos lleguen en condiciones seguras a la mesa de todos los bolivianos.
AEP
