Los vecinos del sector denuncian que el material de construcción del proyecto de la Avenida del Bicentenario tapó el cauce del río.
La Paz, 16 de mayo de 2024 (AEP). – Por lo menos, siete casas del barrio paceño de Bajo Següencoma se llenaron de agua y lodo debido al desborde del río Remedios. Los vecinos denunciaron que pidieron la limpieza del lecho del río de material de construcción, pero la alcaldía no respondió.
La obra que habría dejado tantos desechos es la Avenida del Bicentenario, un proyecto que supuestamente abriría una ruta alterna para unir Calacoto y Mallasa, que fue severamente afectado por las lluvias.
“El alcalde Arias y sus funcionarios conocen los problemas que tenemos. Hemos mandado cartas a la alcaldía, el personal ha venido, han visto lo tapado que está el río, tenían que venir a hacer una limpieza la anterior semana, y nada”, afirmó una de las vecinas afectadas ante Bolivia TV.
Según narró la vecina, los escombros taponearon el cauce natural del río —además de las alcantarillas del lugar, como lo mostraron las imágenes del canal estatal— y esto ocasionó que el agua, que además viene con material de arrastre, terminara en las casas aledañas.
En el momento de la entrevista, la vecina comenzó a contar las casas afectadas y aseguró que son por lo menos siete, sin embargo la Agencia Municipal de Noticias solo identificó tres.
“Ante las lluvias con granizo en el Macrodistrito Sur de La Paz, obreros y maquinaria pesada de la Secretaría Municipal de Resiliencia y Gestión de Vulnerabilidades atienden la emergencia de al menos tres viviendas inundadas en Bajo Següencoma. Trabajaron toda la noche”, aseveró la nota.
El reportaje logró entrar a los hogares y mostrar que el nivel del agua llegó a cerca de un metro de altura. Otros afectados afirmaron que están viendo afectada su salud, al momento de limpiar sus casas, ya que el lodo está lleno de basura. “Estamos con conjuntivitis, no podemos seguir, así hay personas mayores que no pueden limpiar solas”, dijo otra de las afectadas.
Se dio a conocer que durante las primeras horas del desastre el municipio ignoró los llamados de auxilio de los vecinos e incluso llegaron a bloquearlos de los teléfonos oficiales. Más tarde llegaron funcionarios sin ningún tipo de herramientas. Solo cuando ya se había hecho un avance importante se logró contar con una bomba para continuar la limpieza.
Los vecinos pidieron al municipio parar los trabajos de la avenida para utilizar los recursos en la limpieza del río Remedios y en habilitar el sector. “Nunca nos había pasado algo así y ahora ya es la tercera vez que se inunda el barrio”, dijo una afectada.