Los afectados se apresuraban a recibir a Paz y aprovechar para contarle su situación en espera de una respuesta.
La comunidad Achira, en Samaipata, es la más afectada por la riada que arrasó viviendas, y dejó al menos dos desaparecidos. Hasta el lugar llegó este martes el presidente Rodrigo Paz, y en su recorrido a pie escuchaba las preocupaciones y demandas de los afectados.
Hizo, primero, una evaluación de la situación en un sobrevuelo por la zona, desde donde vio la magnitud del desastre natural. Ya en tierra, recorrió a pie parte de las zonas anegadas por el agua y donde los afectados trabajaban para recuperar sus pocas pertenencias salvadas o solo veían cómo perdieron todo.
Los afectados se apresuraban a recibir a Paz y aprovechar para contarle su situación en espera de una respuesta. El panorama es complejo, porque la riada dejó a cientos de personas afectadas, además de casas arrasadas por la fuerza del agua y al menos dos personas desaparecidas.
Acompañado del gobernador cruceño Luis Fernando Camacho, Paz informó de todo el operativo desplazado para atender las demandas de los afectados y de las gestiones en el ámbito internacional, que al momento lograron conseguir $us 380.000 que serán íntegramente destinados a la ayuda humanitaria.
“Estos recursos serán dispuestos por la Gobernación (de Santa Cruz) serán para ayuda humanitaria, no son infraestructuras, son para las familias afectadas y darles el mayor respaldo posible”, explicó el presidente a través de sus redes sociales.
De acuerdo con el Gobierno Autónomo Municipal de Samaipata, al menos 1.000 personas resultaron afectadas y 560 familias quedaron damnificadas.
Ante una desgracia, como el evento adverso en Samaipata, tienen que estar las instituciones para los damnificados y “cobijar y darles el mejor de los tratos y ayuda humanitaria”, demandó el presidente.
La magnitud del desastre natural en Samaipata movilizó un importante nivel de ayuda departamental y nacional.
ABI

