Democracia y respeto a las instituciones

En estos días, Bolivia se encuentra inmersa en un debate crucial que ha llegado a su fin con la Sentencia 1010-2023 emitida por el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP).

Esta resolución establece de manera inequívoca que la reelección indefinida no constituye un derecho humano, cerrando así un capítulo fundamental en la historia política del país.

Es necesario resaltar que el fallo del TCP no solo es concluyente, sino también inapelable, conforme al artículo 203 de la Constitución. Este dictamen representa la última palabra en el debate jurídico sobre la reelección, subrayando la importancia de respetar y acatar las decisiones de las instituciones democráticas.

La opinión consultiva de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que previamente indicó que la reelección no es un derecho humano, encontró su correlato en la sentencia del control constitucional boliviano. La Sentencia 1010-2023 emerge como un hito trascendental que valida y respalda el principio de que las cuestiones fundamentales para la democracia deben ser decididas por las instituciones nacionales.

Es lamentable observar que, frente a este veredicto legal y democrático, el expresidente Evo Morales promueva protestas con el objetivo de revertir la decisión del TCP. Este intento de desestabilización solo sirve para evidenciar la falta de respeto hacia el espíritu democrático y la institucionalidad del país.

Las recientes manifestaciones, lideradas por cocaleros del Chapare y campesinos de Potosí, exigen la renuncia de los magistrados del Tribunal Constitucional Plurinacional, del Tribunal Supremo de Justicia, del Tribunal Agroambiental y del Consejo de la Magistratura. Estas acciones violentas buscan socavar la estabilidad y la institucionalidad del país, ignorando que una sentencia solo puede ser modificada por otra sentencia.

En este contexto, es fundamental recordar que la democracia se basa en el respeto a las leyes y a las decisiones de las instituciones establecidas. La sentencia del TCP representa la culminación de un proceso legal que ha sido guiado por los principios democráticos y constitucionales.

Es momento de que el expresidente reflexione sobre la importancia de preservar la democracia y respetar las instituciones que la sustentan. La reelección no puede ser utilizada como un pretexto para socavar la estabilidad del país.

La Sentencia 1010-2023 ha sentado un precedente claro y firme, y es tarea de todos los ciudadanos proteger y fortalecer la democracia boliviana.

Imprimir