Expectativa y deseos de cambio: voces ciudadanas ante la asunción de Paz y Lara

Las propuestas sobre la economía, la unidad, combustibles y lucha contra la corrupción fueron destacadas por personas consultadas en dos ciudades y siete municipios del país.

La llegada de Rodrigo Paz a la presidencia y de Edmand Lara a la vicepresidencia despertó expectativas renovadas entre muchos bolivianos que ven en esta nueva etapa una oportunidad para reconstruir la confianza en las instituciones, desterrar la corrupción, buscar acuerdos y avanzar hacia tiempos de mayor unidad y estabilidad.

En distintos puntos del país, las opiniones se expresaron entre el optimismo y la esperanza respecto a los resultados de las medidas gubernamentales y la apuesta por dejar atrás los años de confrontación política.
En Santa Cruz, Manuel Hilari observó este inicio con esperanza. Dijo no sentirse identificado con ninguna fuerza política, pero valoró el giro que se abre con la nueva administración.

1

“Somos personas que creímos bastante en lo que iba a pasar, no somos partidarios, pero personalmente sentimos que el cambio es muy bueno. Hay mucha expectativa de que la economía se abra a otros países, ya que estamos muy encerrados en un sistema, como se dice, socialista que al fin y al cabo no nos trajo nada, no nos trajo nada bueno”, señaló.

Para él, el desafío principal es destrabar la economía y fomentar un modelo más abierto y productivo.
En La Paz, Irma Larico habló desde un puesto de comercio en un sábado concurrido. Sus palabras reflejan una necesidad concreta y cotidiana: mejorar la situación económica del país. “Más que todo esperamos que haya muchos cambios porque Bolivia, la verdad, ha caído no sé hasta dónde ya, pero esperamos que haya muchos cambios para todos porque tenemos que levantar Bolivia”, manifestó.

2

Su aspiración es que la nueva gestión reactive el movimiento económico y alivie la difícil situación que enfrentan los trabajadores informales.

Desde Ocurí, en el norte de Potosí, Germán Suyu enfatizó en una demanda que resuena en varias regiones: combatir de manera frontal la corrupción. “La primera motivación es que totalmente barran con la corrupción de todos los municipios de Bolivia. Personalmente en Ocurí, mi municipio, se han perdido 300 mil bolivianos y hasta ahora no hay una explicación. Por eso pedimos que se acabe con esos actos, que se hagan auditorías internas y externas para aclarar”, afirmó.
Según Suyu, apoyar la gestión de Paz y Lara implica también exigirles que la transparencia sea una práctica sostenida y verificable.

Si bien los énfasis varían —desarrollo económico, estabilidad social, lucha contra la corrupción—, los testimonios recogidos coinciden en algo: la población desea cambios visibles y resultados palpables.

34

Para Jorge Vizcarra, la gestión Paz-Lara enfrenta ahora el desafío de traducir todas las aspiraciones en políticas concretas que apuntalen la confianza que la población boliviana está depositando en ellos y “le puedan dar un sentido de rumbo a nuestro país, que ha atravesado años de polarización y desgaste”.

AEP

Regional
Imprimir