Una encuesta reciente encontró que casi el 62% de los votantes cree “probable” que haya violencia en la jornada.
Con el reloj a punto de marcar el final de la jornada electoral en Estados Unidos, las autoridades locales de todo el país están adoptando medidas de seguridad sin precedentes para hacer frente a posibles “escenarios de pesadilla” relacionados con la violencia, informa The Washington Post.
Se informa que al menos dos estados, Nevada y Washington, han desplegado a la Guardia Nacional en caso de disturbios durante las elecciones presidenciales de este 5 de noviembre. El secretario de Estado de Arizona, Adrian Fontes, admitió que porta un chaleco antibalas.
En la sede del recuento de votos del condado de Maricopa (Arizona), los funcionarios vigilan en tiempo real las redes sociales en busca de señales de problemas. Además se han instalado drones de vigilancia para detectar posibles amenazas.
La oficina también tiene previsto desplegar francotiradores en los tejados en caso necesario.
Máxima alerta
Medidas similares se han tomado en otros estados, donde cientos de oficinas electorales “están ahora reforzadas con cristales antibalas, puertas de acero y equipos de vigilancia”, según el reporte.
Por otra parte, el canal de televisión ABC News informó que las agencias de seguridad de EEUU se encuentran en máxima alerta ante un aumento de amenazas contra funcionarios electorales, un día antes de los comicios presidenciales, y refuerzan las acciones de protección.
Las agencias de seguridad han tenido que desviar “recursos sustanciales” para abordar estas amenazas contra funcionarios electorales en la víspera de las elecciones, según una evaluación de la Oficina de Inteligencia del Departamento de Policía de Nueva York, difundida por el canal de noticias.
La tensión en la carrera presidencial se agudizó desde el 13 de julio, cuando el expresidente estadounidense y candidato presidencial republicano Donald Trump sufrió una herida de bala en la oreja derecha y fue hospitalizado brevemente tras un intento de asesinato en su mitin de Butler, Pensilvania.
Una encuesta reciente de Scripps News e Ipsos encontró que aproximadamente el 62% de los votantes estadounidenses, incluyendo el 70% de los demócratas y el 59% de los republicanos, creen que es “algo” o “muy probable” que se produzca violencia luego de la jornada electoral, el 5 de noviembre.
Agencias