La defensa alegó que la posibilidad de cumplir la condena en su domicilio se debe a su edad avanzada.
Un juez aprobó ayer la solicitud de la expresidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner de cumplir la pena de prisión en su domicilio por un caso de supuesta corrupción.
La condena entró en vigencia el mismo día del anuncio y se encuentra detenida en su casa del barrio capitalino de Constitución.
Según la resolución judicial, Fernández no tendrá que comparecer en los tribunales federales como se tenía previsto. El juez Jorge Gorini le ha impuesto a la exmandataria una sucesión de condiciones entre las que no podrá abandonar su domicilio “salvo en situaciones excepcionales de fuerza mayor que deberá justificar debidamente”. Finalmente, también se le ha impuesto un dispositivo electrónico.
ACTIVIDADES PROHIBIDAS
Además, se le han prohibido actividades que puedan “perturbar” la tranquilidad del vecindario o alterar la convivencia pacífica. Antes de 48 horas, Fernández de Kirchner tendrá que presentar ante la justicia un listado de las personas que integran su grupo familiar, su custodia policial, los profesionales médicos que la tratan normalmente y los abogados que la representan, que podrán acceder a su domicilio sin autorización judicial.
Previamente, la Fiscalía argentina había rechazado este tipo de pena de seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos al no cumplir con los requisitos. Sin embargo, la defensa alegó que la posibilidad de cumplir la condena en su domicilio se debe a su edad avanzada.
AEP