Haciendo un alto en su agenda, las autoridades del Gobierno salieron del Palacio Quemado, a las 12.00, para cumplir la tradición en La Paz.
La Paz, 25 de enero de 2024 (AEP).- Como manda la tradición de la fiesta de la abundancia, el presidente Luis Arce y el vicepresidente David Choquehuanca visitaron ayer, al mediodía, la feria de la Alasita, en la ciudad de La Paz. Rodeados de costumbres arraigadas en la rica cultura boliviana, ambos recibieron el cariño de la gente y regalos en miniatura como augurios de prosperidad para el Gobierno nacional, en favor del pueblo.
Ayer, 24 de enero, marcó el inicio de una festividad única y colorida: la Alasita. Las calles de la urbe paceña se abarrotan de comensales, quienes a través de las miniaturas abrieron puertas a grandes sueños. Es que este evento anual no solo celebra la tradición y la artesanía, sino también simboliza la esperanza y la prosperidad para el año que comienza.
Haciendo un alto en su agenda, las autoridades salieron del Palacio Quemado a las 12.00 para cumplir la tradición de la Alasita, que se celebra cada 24 de enero en conmemoración al dios de la abundancia, el Ekeko.
En la tradicional muestra, los artesanos expusieron en sus coloridos puestos miniaturas de todo lo que uno pueda imaginar: desde billetes hasta electrodomésticos, pasando por diplomas, automóviles y casas, además de estatuillas del Ekeko, representado por un hombre regordete y de baja estatura que carga bienes y alimentos y cumple los deseos si se pide con fe en esta fecha.
El Jefe de Estado, acompañado de Choquehuanca y la ministra de la Presidencia, María Nela Prada, recibió varios obsequios de los artesanos y de la población en la feria, en inmediaciones de la plaza Murillo.
En el escenario festivo, impregnado de tradición y afecto, el Presidente se sumergió en las tradiciones. Compró una serie de objetos para luego hacer el sahumerio de las miniaturas, que forma parte del ritual para bendecir las artesanías para que los sueños se hagan realidad.
La ministra Prada manifestó que en la festividad no solo se observa la fe, el compromiso con la cultura, sino también el movimiento económico que generan los productores a través de sus productos novedosos en miniatura.
La autoridad nacional lamentó que esta actividad haya sido perjudicada por los bloqueos de caminos ya que muchos artesanos no pudieron llegar de otras regiones del país.
La fiesta es una de las celebraciones más tradicionales en la ciudad de La Paz en Bolivia. La característica principal de esta festividad es la venta de miniaturas, productos agrícolas, piedras circulares de colores o con alguna particularidad.
Este intercambio se practica con alegría y con la esperanza de tener, durante todo el año, los productos adquiridos.
El recorrido concluyó con Arce y Choquehuanca distribuyendo billetes entre los asistentes, un acto simbólico que refleja su deseo de ver realizadas las aspiraciones del pueblo boliviano en 2024.
El 6 de diciembre de 2017, los recorridos rituales en La Paz, durante la feria de la Alasita, fueron inscritos en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
