La paliza concluyó a los 84 minutos, con un remate de derecha, dentro del área, de Pablo Galdames, quien aprovechar que el rival estaba alicaído y sello la histórica goleada.
Nacional Potosí se despidió de la Copa Sudamericana con una humillante y vergonzosa goleada a manos de Independiente de Argentina por 0-7, en partido de la última fecha de la serie A, que se disputó anoche en el estadio Libertadores de América de Avellaneda.
No fue la mejor manera de poner punto final a un ciclo, tampoco fue la forma más digna de marcharse para el entrenador César Vigevani, quien dirigió su último compromiso al equipo potosino y se llevó como recuerdo una pobre actuación de sus dirigidos.
El elenco de la banda roja se presentó al duelo con la misión difícil de ganar para pelear por la clasificación, aunque llegó bastante golpeado al compromiso internacional, con poca fe, una dirigencia quebrada por problemas internos, el fútbol y los resultados caminando por rutas distintas, le cortando el proceso a Vigevani y con muchos líos al interior de la plantilla.
Independiente hizo y deshizo a su adversario, los goles saltaron en la etapa inicial, primero con dos y en el complemento, se desbordó la goleada, frente a un rival que estaba parado, vulnerable y sin dignidad en la cara para enfrentar a los rojos de Avellaneda.
Santiago Montiel anotó el 1-0, a los 26 minutos, con un tanto de cabeza, después de un penal que atajó el arquero Saidt Mustafá y el rebote le llegó. Diego Tarzia aumentó (2-0) la diferencia, a los 34 minutos, con un disparo de pierna izquierda.
Felipe Loyola colocó el 3-0, a los 51’ con un remate, dos minutos después, Montiel anotó el 4-0 con un golpe de cabeza en el segundo palo. El quinto tanto fue convertido por Lautaro Millán, a los 77´, con disparo diagonal.
Los cinco goles parecían insuficientes para Independiente y ante un rival débil y sin norte, mantuvo la presión para ampliar la cuenta. Para variar, el defensor Santiago Echeverría hizo un autogol para el 6 a 0, a los 81´.
La paliza concluyó a los 84 minutos, con un remate de derecha, dentro del área, de Pablo Galdames, quien aprovechar que el rival estaba alicaído y sello la histórica goleada.
El gol de cabeza de Montiel, el primero de Independiente, que abrió la goleada.
AEP
