Con la derrota que sufrió ya suma seis partidos que no conoce el sabor del triunfo, pese a tener una plantilla de buenos jugadores, con buen cartel y bien pagados.
El cuadro atigrado no tuvo conexión entre sus líneas, la defensa dio muchas licencias, jugó sin un conductor visible porque Michael Ortega no fue capaz de generar jugadas de peligro.








