Para 2023 el Ministerio de Minería tiene planificado crear, además, dos refinerías de zinc que ayudarán a la recuperación de metales.
La Corporación Minera de Bolivia (Comibol) tiene previsto este año la creación de dos nuevas empresas en los departamentos de Oruro y Potosí para explotar yacimientos de plomo, zinc y plata.
Así lo hizo conocer el presidente de la Comibol, Marcelino Quispe. Se trata de factorías de mediana categoría que se encargarán de la extracción de minerales complejos: en el proyecto Mesa de Plata, en Potosí, y en el yacimiento de Negrillo, en la región de Oruro.
“Ambos yacimientos cuentan con complejos de plomo, zinc y plata”, aseguró Quispe en una entrevista para la revista de la Cámara de Exportadores de Cochabamba (Cadex).
De acuerdo con el titular de la Comibol, en ambos proyectos se invertirán $us 150 millones y se generarán unas 500 fuentes de empleo.
Si bien la cotización de algunos minerales fue en descenso en el último tiempo, Quispe confía en una mejora sustancial en los próximos meses y años por la tendencia global de ir sustituyendo el petróleo por elementos menos contaminantes.
“Tenemos un desafío. Los yacimientos de petróleo en el mundo entero prácticamente están en etapa de extinción y están siendo reemplazados por energías limpias. Entonces, a futuro, los países van a sobrevivir con la generación de metales, que tienen un mercado asegurado en la industria y van a estar siempre vigentes ”, dijo.
En ese contexto, Quispe ratificó la decisión del Gobierno nacional de emplazar dos refinerías de zinc en Potosí y Oruro que procesarán los minerales explotados en los yacimientos ubicados en ambas regiones, con el fin de recuperar metales agregados como indio y galio.
En cada refinería se invertirán $us 350 millones.
En el caso de la factoría que estará en Oruro, se proyecta la refinación de 65 mil toneladas (t) de zinc metálico al año con el mineral proveniente de la Empresa Minera Colquiri (EMC), cooperativas y minas como Bolívar y Porco.
Mientras que la de Potosí utilizaría procesos de tostación, lixiviación y electrólisis. Tendrá capacidad de tratamiento de 150 mil toneladas métricas (TM) de concentrados por año y producirá 64.800 TM finas de zinc metálico, 224 TM finas de cadmio metálico, 511 TM finas de indio metálico y 132 mil toneladas de ácido sulfúrico.
Por otro lado, Quispe indicó que el Ministerio de Minería tiene planificado crear dos refinerías de zinc para 2023, también en los departamentos de Oruro y Potosí.
Según el presidente de la Comibol, la intención es que los concentrados producidos en los nuevos yacimientos de Potosí y Oruro se refinen en esas dos nuevas plantas, en las que se pretende recuperar metales agregados (por los que usualmente no pagan los compradores externos) para obtener indio o galio. Actualmente, la Corporación Minera de Bolivia cuenta con alrededor de 7.000 empleados.