El gobierno del presidente Arce tiene la firme decisión de mantener el precio del pan de batalla a 50 centavos.
La Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa) anunció que tiene previsto entregar hasta 2,5 millones de quintales de harina de trigo al sector panificador durante 2025, garantizando así el abastecimiento necesario para la elaboración del tradicional “pan de batalla” a peso y precio justo.
“Este año tenemos proyectada la cantidad de 2.400.000 a 2.500.000 bolsas de 50 kilos al sector panificador”, informó Franklin Flores, gerente general de Emapa, en una conferencia de prensa.
Para cumplir con esta meta, la empresa estatal planea acopiar y procesar 150.000 toneladas de trigo.
“Esto demuestra que el Gobierno nacional tiene como objetivo abastecer la demanda de nuestros hermanos panificadores con la harina, con materia prima para el pan de batalla; y obviamente garantizar el precio del pan de batalla, el peso del pan de batalla. Como Gobierno nacional, la decisión firme es mantener este precio a 50 centavos en la paz, Cochabamba, Beni y los dos departamentos precios aún más bajos”, dijo Flores.
El gerente destacó el crecimiento sostenido en las entregas de harina al sector panificador durante los últimos años.
Precisó que en 2020 se despacharon 1.000.000 de quintales; en 2021, 1.087.000 quintales; en 2022, 1.833.000 quintales; en 2023, 2.184.000 quintales; y en 2024, unos 2.307.000 quintales.
Este aumento refleja el compromiso del Gobierno con el fortalecimiento de la industria panificadora y la atención a las necesidades de los consumidores.
“Estamos trabajando para atender las demandas del sector y llegar a consensos que beneficien tanto a los productores como a los consumidores”, agregó.
Entre las demandas del sector panificador destacan el acceso continuo a insumos de calidad y condiciones favorables para la adquisición de la materia prima.
Flores explicó que el apoyo al sector panificador también busca dinamizar la economía rural, promoviendo la producción nacional de trigo y fortaleciendo la cadena productiva desde los agricultores hasta los consumidores finales.
La previsión de acopiar 150.000 toneladas de trigo implica también un esfuerzo logístico significativo para garantizar que las regiones del país reciban este insumo de manera oportuna.
Con esta estrategia, Emapa reafirma su compromiso de fortalecer la soberanía alimentaria y asegurar el acceso a productos esenciales para la población boliviana. Además, este plan busca consolidar la estabilidad económica del país y responder a las necesidades crecientes de una población en constante crecimiento.
La Paz / AEP