Durante su participación en la IV Cumbre de la Amazonia de jefes de Estado de la región, en el norte de Brasil.
La Paz, 8 de agosto de 2023 (AEP-Digital).- El presidente de Bolivia, Luis Arce, llamó este martes a los países de la región, durante su participación en la Cumbre amazónica, que se celebra en la ciudad de Belém, Brasil, a defender la amazonia frente a las estrategias injerencistas de Estados Unidos y Europa, que aspiran a apoderarse de los recursos estratégicos que alberga ese territorio rico en minerales y fuentes de agua dulce.
“La instalación de bases militares en la región y dentro de ella en la amazonia es algo que nos debe llamar la atención y a estar atentos. Pero, en esa visión, es preocupante que Europa esté en la misma posición (que EEUU), aunque con formas distintas. Unos quieren controlar la amazonia por medios militares y de ONG, y otros a través de las segundas. No aceptamos formas abiertas y encubiertas de querer controlar la amazonia”, dijo en la cita internacional.
El Primer Mandatario boliviano destacó que el amplio bosque tropical que comparten países de Sudamérica alberga recursos naturales estratégicos, por lo que, junto con el Caribe, es no solo de interés del Departamento de Estado, sino del Departamento de Defensa de los EEUU.
En esa línea, alertó que la ambición de apoderarse de los recursos naturales de los pueblos, propia de los países que se dicen desarrollados, sigue vigente. Afirmó que por eso el interés del imperialismo de militarizar la amazonia, directa e indirectamente.
Llamó a los dignatarios a recordar las palabras de la comandante del Comando Sur de Estados Unidos, Laura Richardson, quien en julio de 2022 dijo que: “Latinoamérica es rica en recursos minerales, tierras raras, el triángulo de litio está en esta región. Hay muchas cosas que esta región tiene para ofrecer”.
“Para Bolivia es preocupante que la visión geopolítica de algunas potencias extranjeras pueda poner en riesgo el bienestar no solo de comunidades locales y la riqueza de su conocimiento ancestral, sino a aquellos componentes estratégicos como las fuentes de agua dulce o la biodiversidad de la amazonia”, remarcó
En ese contexto, afirmó que es imprescindible abordar esta cuestión desde una perspectiva de respeto a la soberanía y autodeterminación de los países de la región.
“Rechazamos enfáticamente cualquier intento de dominación o explotación de la región por parte de potencias extranjeras, así como la instrumentalización de intereses geopolíticos que pongan en riesgo la armonía de la amazonia”, enfatizó.
Por otro lado, aseguró que esa no es la única preocupación que afronta la región tropical, recapituló una serie factores que amenazan la existencia y función de la amazonia como 'pulmón del mundo'.
“La deforestación en la amazonia ha alcanzado niveles alarmantes en las últimas décadas. Bosques milenarios están siendo devastados a un ritmo acelerado. Árboles centenarios son talados ilegalmente y sin planificación. Este es uno de los mayores desafíos que enfrenta la amazonia. La tala de árboles para la agricultura, la ganadería y la minería que han llevado a la pérdida de millones de hectáreas de bosque”, expresó Arce.
Indicó que este flagelo no solo amenaza la biodiversidad, sino también el clima global, al ser la selva tropical un poderoso regulador del clima, lo que la hace más valiosa al absorber dióxido de carbono, en este tiempo de crisis climática.
Precisamente, el cambio climático es otro desafío crítico que atenta a la existencia de la amazonia, que ocurre a un ritmo alarmante, impulsado principalmente por la emisión de gases de efecto invernadero derivados de la actividad humana e industrial, que provocan sequías más intensas y prolongadas, patrones de lluvia alterados y un aumento en la frecuencia e intensidad de los incendios forestales, advirtió.
“El hecho de que la amazonia sea un territorio tan importante no implica que toda la responsabilidad de las consecuencias y efectos del cambio climático deban recaer en nuestras manos, en nuestros pueblos y en nuestras economías, porque esta crisis climática mundial no ha sido generada por nosotros”, resaltó.
Dijo que todos esos efectos negativos deben ser asumidos por aquellos países industrializados que influyeron de manera magnificada a las emisiones de carbono, gases de efecto invernadero y otros contaminantes a nivel mundial, quienes deben cooperar en mayor medida a la gestión de este fenómeno.
La explotación de recursos naturales también representa otro desafío para la amazonia, porque pueden causar daños ambientales y sociales significativos, como la contaminación del agua y la degradación del suelo, señaló.
Por otro lado, aseveró que no se puede dejar de reconocer que la amazonia alberga a miles de comunidades indígenas, cuyos conocimientos tradicionales, es decir la ciencia de los pueblos indígenas, han sido fundamentales para el equilibrio de la naturaleza, de la Madre Tierra, por lo que las comunidades indígenas que han habitado la región durante siglos enfrentan conflictos territoriales, desplazamiento y amenazas a sus formas de vida tradicionales.
“El reconocimiento y el respeto de los derechos de estas comunidades son fundamentales para la preservación de la amazonia”, mencionó.
Así también recordó que no está exenta de las actividades ilegales que afectan a las comunidades que la habitan, que producen impacto negativo en la naturaleza y en las actividades económicas legales que se desarrollan en ese medio.
Sostuvo que entre las principales actividades ilegales está la minería ilegal, que emplea sustancias que contaminan el medioambiente y utilizan una fuerza de trabajo que se reproduce en condiciones inhumanas.
“Lo mismo puede decirse del narcotráfico, ya que en el uso de esta ruta lo que hace es no solo producir temores en las comunidades sino incorporarlas por la fuerza para encubrir sus actividades, las mismas que al mismo tiempo afectan al equilibrio de la naturaleza”, agregó.
Por todo ello, llamó a los países a actuar, “porque la Madre Tierra no puede esperar más”.
Destacó que el compromiso con la conservación y protección de la amazonia en la cumbre de los países debe ser “firme y decidido” ante el clamor de la naturaleza.
“Cuidar a la Madre Tierra y defender a la humanidad son dos tareas históricas necesarias e impostergables”, finalizó.