Autoridades del Ejecutivo pidieron que Morales enfrente primero sus propios procesos antes de acusar al presidente Arce.
El Gobierno respondió con firmeza a las declaraciones del expresidente Evo Morales, quien pidió iniciar un juicio de responsabilidades contra el presidente Luis Arce. Los ministros calificaron la petición de “inmoral” y señalaron que el exmandatario aún enfrenta procesos judiciales pendientes.
El ministro de Desarrollo Rural y Tierras, Yamil Flores, fue uno de los primeros en pronunciarse. “La respuesta es clara: no tiene ninguna moral para pedir procesos, mientras él no se someta a los que pesan en su contra. Todos los bolivianos estamos esperando que Evo responda ante la justicia”, declaró en contacto con los medios.
Flores subrayó que, en un Estado de derecho, nadie está por encima de la ley. “Cuando cumpla con la justicia, podrá hablar de procesos para otros. Hasta entonces, sus acusaciones no tienen legitimidad”, agregó, luego de aludir a las causas abiertas contra Morales por diversos hechos durante su gestión.
Por su parte, el ministro de Obras Públicas, Édgar Montaño, también cuestionó duramente las intenciones de Morales. “¿Cómo puede pedir un juicio si él tiene procesos pendientes? Debería ser el primero en ir ante la justicia. ¿Dónde están las pruebas contra nuestro Presidente? ¿Se las van a inventar?”, se preguntó.
Montaño sostuvo que este tipo de declaraciones solo dividen al país y generan desinformación. “Acusar sin pruebas y no asumir responsabilidades es traicionar al pueblo y al proceso político. Ya hemos visto cómo varios personeros actuaron igual en el pasado y después se arrepintieron”, enfatizó.
El Ejecutivo insiste en que defenderá la institucionalidad democrática y responderá con firmeza a lo que consideran ataques infundados.
AEP
