Los internos exigen al gobernador Santos Quispe la inmediata cancelación de los fondos destinados a su alimentación diaria.
Desde tempranas horas de este viernes, un grupo de reclusos del penal de San Pedro, en la ciudad de La Paz, protagoniza una protesta en los techos del recinto penitenciario.
Los privados de libertad encendieron fogatas y desplegaron pancartas en demanda del pago de sus prediarios, que —según denuncian— no se cancelan desde hace más de cinco meses.
La medida llamó la atención de vecinos y transeúntes de la zona, quienes observaron columnas de humo que salían del interior del penal. Los internos, portando carteles, responsabilizan al gobernador paceño, Santos Quispe Quispe, por el retraso en la entrega de los recursos destinados a cubrir sus necesidades básicas de alimentación.
El prediario es un monto económico que el Estado asigna de forma diaria para garantizar la alimentación de los privados de libertad. En este caso, los reclusos aseguran que la falta de este pago ha generado una situación crítica dentro del penal, que afecta a centenares de internos que dependen de esos recursos para subsistir.
Fuentes del recinto señalaron que los representantes de los reos ya habrían enviado varias notas a la Gobernación sin obtener respuesta. Ante la falta de atención, optaron por subir a los techos y visibilizar su reclamo de manera pacífica, aunque con un tono de creciente tensión.
Hasta el mediodía, las autoridades penitenciarias y representantes de la Gobernación intentaban establecer un diálogo para frenar la protesta y atender las demandas de los reclusos. Entretanto, la Policía mantiene un cordón de seguridad en los alrededores del penal para evitar incidentes con la población civil.
AEP
