En los últimos tres años, el Gobierno socialista del presidente Luis Arce ha demostrado un compromiso inquebrantable con la salud de la población boliviana, destinando más de Bs 1.465 millones a los gobiernos departamentales.
Estos fondos fueron asignados con el objetivo claro de garantizar la atención médica y el acceso gratuito a medicamentos para los asegurados en el Sistema Único de Salud (SUS).
En medio de una crisis global sin precedentes, el presidente Arce y su administración han extremado esfuerzos para mantener y fortalecer el Sistema Único de Salud, un sistema que ahora abarca a más de 7,4 millones de bolivianas y bolivianos.
El compromiso del Gobierno se traduce en acciones tangibles, y los datos revelan que desde 2021 se han brindado más de 157 millones de atenciones gratuitas en servicios de salud, marcando un hito significativo en la historia de la atención médica en Bolivia.
La visión del SUS no se limita a consultas externas; abarca intervenciones quirúrgicas especializadas, internación, curación y rehabilitación, todo ello de manera gratuita y equitativa. El compromiso con la salud no conoce fronteras, y el SUS también garantiza tratamientos oncológicos, diálisis para pacientes con problemas renales, trasplantes de alta complejidad, radioterapias y quimioterapias, entre otros servicios especializados, sin imponer barreras económicas a aquellos que más lo necesitan.
Desde que asumió el mando de la nación, en noviembre de 2020, el presidente Arce ha liderado un esfuerzo continuo para poner la salud de la población en el centro de la agenda gubernamental. La inversión significativa en el sistema de salud demuestra la prioridad que se le otorga a la vida y al bienestar de la ciudadanía.
El compromiso constante con la atención médica universal y gratuita refleja un enfoque progresista y humano en la gestión gubernamental de Arce.
El presidente Luis Arce y su administración no solo han enfrentado los desafíos de la pandemia y la crisis mundial, sino que han transformado estos desafíos en oportunidades para fortalecer el acceso a la salud en Bolivia.
La inversión en el Sistema Único de Salud es un testimonio de un liderazgo visionario y decidido, que pone la salud de la población en el centro de sus prioridades.
