La FAM y la COB vienen exigiendo la aprobación de 12 leyes sobre créditos de inversión bloqueadas en la ALP por más de $us 1.076 millones.
Los políticos y politiqueros opositores al gobierno constitucional y legítimo del presidente Luis Arce Catacora desde hace meses bloquean los créditos internacionales destinados al pueblo humilde y trabajador, utilizando para ello la mentira en noticias falsas publicitadas en los medios de comunicación a su alcance, las redes sociales, los guerreros digitales, y la industria de la desinformación, denunciando inclusive hechos de corrupción inexistentes para dañar la imagen del Órgano Ejecutivo, manipular al pueblo, convulsionar el país y dar un golpe de Estado como solución final a sus fracasos, practicando lo que Joseph Goebbels asesorando a Adolf Hitler decía: “Miente, miente, miente que algo quedará, cuanto más grande sea una mentira más gente la creerá”.
La FAM (Federación de Alcaldías de Bolivia) y la COB (Central Obrera Boliviana) vienen exigiendo la aprobación de 12 leyes sobre créditos de inversión bloqueadas en la Asamblea Legislativa Plurinacional por más de $us 1.076 millones destinados a la construcción de vías, generación de empleos, a palear la crisis climática, sequía, riegos, puentes, y otros que pueden servir también para inyectar a la economía nacional; pero por el bloqueo referido que constituye sabotaje al pueblo y por ende a la democracia se ocasiona graves perjuicios al pueblo boliviano impidiendo que la economía mejore; convirtiéndose así dichos políticos en traidores del pueblo y traidores de la democracia, porque reiteraron: “No aprobaremos los créditos”.
Cuya traición por intereses personales y de grupo equivale a desconocer la democracia y convertirse en enemigo de la Patria, porque DEMOCRACIA es la doctrina política favorable a la intervención del pueblo en el gobierno, el predominio del pueblo en el gobierno político de un Estado, o gobierno de las mayorías, conforme nos enseña el Derecho Político y la Ciencia Política, DEMOCRACIA que fue recuperada por Luis Arce Catacora postulado por el MAS-IPSP al ganar las elecciones generales del 18 de octubre de 2020 con el 55,11%.
Tales políticos no quieren aprobar dichos créditos porque rechazan la conformación del Estado Plurinacional de Bolivia, porque odian que los “indios” e “indias” —como dicen ellos— sean senadores, diputados, ministros, viceministros, directores, gobernadores, alcaldes, asambleístas, concejales y sean parte del gobierno central con ponchos y polleras, entregando obras casi todos los días para beneficio del pueblo, y solucionando los problemas que dejaron los golpistas de 2019 y el gobierno de facto de Jeanine Añez; quieren volver a la República para explotarlos y esclavizarlos a esos “indios” e “indias” sin piedad, aunque el Senado que sesionó en Uyuni el miércoles pasado, porque el pueblo organizado está en vigilia, aprobó el crédito de $us 223,4 millones para la construcción de los tramos 1 al 3 de la carretera Uyuni-Hito LX, aprobación que psicológicamente se puede ver, que fue con rabia y por miedo a ser huasqueados con el ‘quimsacharani’ por el pueblo perjudicado y cabreado, por ello aprobaron contra sus intereses y planes políticos, esperando hacer creer que están identificados con los derechos y necesidades de los “indios” e “indias” para que los apoyen, sin embargo siguen gritando ¡No aprobaremos los créditos! ¿Cinismo?
El hecho de no querer aprobar los referidos créditos es ignorar que el MAS-IPSP actual o refundado como MAS-IPSP DEL COLLASUYO puede ganar fácilmente las elecciones generales de 2025 y gobernar por más de 500 años, porque los aymaras, quechuas y tupiguaraníes que componen el Estado Plurinacional de Bolivia siempre estarán unidos y nunca serán vencidos, por sustentarse en el presagio de TÚPAC KATARI que, a tiempo de ser descuartizado por la derecha fascista, dijo: “Volveré y seré millones”, además de estar respaldada en el PACHAKUTI, que está en el Ajayu de todos los aymaras, quechuas y tupiguaraníes, peor aún si la mayoría de las bolivianas y los bolivianos saben que a los políticos opositores y a la derecha fascista no les interesa los derechos del pueblo, sino sus intereses personales y de grupo. Al respecto conviene leer EL PODER Y LA GLORIA, de Graham Greene.
Concluyendo, los políticos y politiqueros opositores y fascistas nunca se identifican con los derechos y necesidades del pueblo, por ello no son demócratas verdaderos sino falsos demócratas, y por intereses personales y de grupo quieren unirse desesperadamente todos contra el MAS-IPSP, retomando sus planes de la “la media luna” y el “federalismo” para dar un golpe de Estado al gobierno constitucional y legítimo de Luis Arce Catacora y David Choquehuanca, y así sus líderes detenidos en las cárceles sean puestos en libertad, sus líderes que aún están libres no sean aprehendidos, y todos queden impunes.
Escrito por Armando Aquino Huerta.