Han sido varios días , los cuales han expuesto dón- de están los verdaderos promotores de división en la izquierda boliviana, los cuales mantienen un lineamiento de “una sola persona” para can- didato, nos referimos al “candidato” que hacía alusión Car- los Romero, obviamente a esa persona con poderes “mesiá- nicos”, pero, más allá de ello, debemos hacer un llamado a la autocrítica y evaluar algunos puntos que son necesarios para leer entre líneas las últimas declaraciones que ha lanza- do el presidente del Senado (quien es duramente atacado por el Evismo), en el marco de la autocrítica convocando a la re- flexión de él y su entorno (si , él ya tiene un entorno):
1) No se puede hablar de unidad cuando quedan po- cos meses para las elecciones dilatando la aprobación de le- yes para tener acceso a recursos que irán en beneficio del pueblo boliviano (al final se invierte en Bolivia, dando em- pleos directos, indirectos etc.), dilatando su aprobación bajo un supuesto de no claridad en la inversión, ojo, en las épocas de bonanza con el MAS, se realizaron hasta infraestructura u obras con menos justificación (Museo de Orinoca, canchas, ojo, no digo que esté mal, pero nadie cuestionaba su aproba- ción), nadie se oponía (del MAS), porque se sabía la importan-
cia de no frenar la inversión, esto incluso funcionaba como justificación de generación de empleos directos e indirectos, dando flujo de circulante en la población de la zona, por tanto es necesario plantear una unidad real, sincera, con progreso, basada en hechos, no solo en el discurso, ya lo decía el coman- dante Fidel Castro: “Las ideas políticas de nada valen si no hay un sentimiento noble y desinteresado”, la no aprobación de le- yes no perjudica al Gobierno, sino al pueblo en su conjunto.
2) Cuidarse del caudillismo y culto a la personalidad, en los tiempos que se es buscado por todos y te reúnes con to- dos, existe el riesgo de replicar los mismos errores del prede- cesor en desgracia, esto tomando una valoración seria sobre el maltrato sufrido por quienes hace semanas te idolatraban y que hoy te agreden, debe llamar seriamente a la reflexión so- bre las bases en las que se está construyendo el proyecto de persona política a ser, ¿sólido?, ¿con identidad propia?, ¿con unidad en las organizaciones? o con un perfil de continuar siendo el ”lloqalla” maltratado por no coincidir con las premi- sas de viejos actores en debacle político. Ojo, esta situación no solo es aplicable para esa izquierda mal llamada “radical” sino también para esa derecha rancia que no sabe cómo tratar de conseguir adeptos, así se ve con el empresario Claure y otros actores políticos. Por tanto tener recaudo de las adulaciones y de lisonjas, se debe construir en base a lo colectivo, ese debe ser el horizonte.
3) Lo interesante: plantea unidad, pero no acla- ra de la “unidad” en torno a “qué”, “proyecto” o “perso- na”; de ser proyecto, conseguirá una alta aceptación, pero además de dejar de lado las posiciones radicales (entiéndase lo que hace ese sector que impulsa el cul- to a la persona), esto puede amplificar el radio de traba- jo, incluyendo el apoyo del aparato estatal (servidores públicos), conjuncionando otros actores políticos de iz- quierda, no únicamente en el discurso, sino también en los hechos, planteando de forma muy sutil un FRENTE AMPLIO DE IZQUIERDA.
Hoy muchos lo buscarán, como alguna vez buscaron a Evo, varios que en su momento fueron los responsables de decirle que la repostulación era buena idea, que no recono- cer el referéndum también lo era y dichos actores son los que terminan dando paso al culto a la persona, hoy están endulzando la oreja de este actor político, que en menos de seis años fue amado, odiado por el mismo grupo de perso- nas, evistas radicales.
La responsabilidad del uso de la palabra UNIDAD radica en dialogar, conversar con organizaciones sociales y secto- res del gobierno, que en sí han abordado sin reproches per- sonales (pese a las trabas colocadas en el Senado) a trabajar conjuntamente dejando de lado esa “falsa unidad” basada en una “persona”, para abordar una UNIDAD basada en un proyecto colectivo.
POR: Gabriel Campero Nava