No existe una receta única ni una política cultural que auspicie, oriente y, menos, financie los centros culturales de barrio.
La Paz, 26 de noviembre de 2023 (AEP). – Misteriosos son los nacimientos de los centros culturales en los barrios. A veces impulsados por jóvenes pertenecientes a fraternidades folklóricas que, como prolongación de sus ensayos, dan por reunirse para impulsar actividades diversas; en otros casos, son estudiantes universitarios que, habiendo encontrado actividades culturales en el centro (antes no lo percibían desde su barrio), se dan a la tarea de intentar reproducir los mismos en su propia zona, en algún espacio de su casa, en la parroquia, en la sede de la organización territorial de base (OTB); también hay los que, con aptitudes teatrales, musicales o plásticas, se empeñan en compartir su arte con el vecindario, enseñándolo en talleres o a través de espectáculos. No existe una receta única ni una política cultural que la auspicie, oriente y, menos, financie.
Milen Copa (MC) y Daniel García (DG) traían desde su niñez su afinidad por el arte; ella, impulsada por su madre, declamadora desde pequeña, luego convertida en actriz de teatro y gestora cultural; él, enamorado de la música y las danzas comunitarias bolivianas en su natal Bogotá, Colombia.
Ambos también eran (y son) practicantes de las artes marciales y un campeonato internacional los juntó para emprender la construcción de El Rinconcito Cultural en Villa Pagador de Cochabamba.
Esta zona también es un rinconcito formado a través de la migración, muchas veces estigmatizado por conflictos externos e internos y, otras veces, ninguneado por el centralismo que predomina en lo público y en las artes. Este lugar que habíamos elegido para vivir y para hacer crecer nuestros proyectos tiene mucho más para dar por su creciente juventud y su herencia ancestral altiplánica (MC).
Los conflictos políticos y la pandemia fueron una prueba que Villa Pagador superó con solidaridad y resiliencia, experimentando luego una dinamización económica nunca antes vista, sin encontrar un eco equivalente en lo artístico cultural.
Es así como —en agosto de 2021— vimos la oportunidad de iniciar El Rinconcito Cultural, impulsando el Teatro Andante, trayendo elencos teatrales profesionales a los colegios; la Escuela Elemental para brindar preparación artística a niños, adolescentes y jóvenes; el Rincón Goloso como un espacio para probar culinarias diferentes; la Escena 3x3 que es nuestro pequeño escenario para presentaciones artísticas… (DG)
Los proyectos de El Rinconcito son como una caja de herramientas, se activan y ponen en marcha de acuerdo con las necesidades y oportunidades de cada momento.
Nuestro empeño es que Villa Pagador pueda hallar y hacer escuchar su propia voz artística.
Con un vecindario, dirigentes de la OTB y unidades educativas indiferentes al principio, de a poco se despierta el interés y aparecen las muestras de apoyo por y para El Rinconcito Cultural.
* Es parte de Títeres Elwaky y coordina el proyecto Arte en mis Barrios.