El canciller de Ecuador, Gustavo Manrique, cuyo país posee una prolífica industria petrolera en la selva, instó a las naciones convocadas a "reinventarse" y abandonar el modelo de "explotación desmedida".
(AEP-Digital).- En la primera plenaria de líderes, varios representantes en la Cumbre de la Amazonía, que se celebra en Belém, Brasil, coincidieron en la necesidad del enfrentamiento regional al cambio climático.
El primer ministro de Guyana, Mark Phillips, instó a "fortalecer" la unión de los países de la región frente a los desafíos planteados por el cambio climático, así como al "fortalecimiento institucional" de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA).
Asimismo, Phillips hizo un llamado para que los países firmantes levanten su "voz colectivamente" de cara a las próximas cumbres del clima. Asimismo, destacó que "Guyana, como estado productor de petróleo, continúa dirigiendo sus esfuerzos a la diversificación de la cartera energética para incluir fuentes renovables de energía".
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores de Surinam, Albert Ramdin, aseveró que es necesario "simplificar" los instrumentos financieros internacionales disponibles para afrontar el cambio climático. "Nuestro desarrollo económico está amenazado por el cambio climático, con un número creciente de fenómenos adversos", afirmó.
Ramdin se mostró abierto también a "reformar" los estatutos de la OTCA para "adaptarlos a la realidad"; pidió "aumentar" las asociaciones regionales e internacionales y anunció que su país apoyará "todos los puntos" de la declaración de líderes, la cual calificó de "documento histórico y ambicioso".
A su vez, el canciller de Ecuador, Gustavo Manrique, cuyo país posee una prolífica industria petrolera en la selva, instó a las naciones convocadas a "reinventarse" y abandonar el modelo de "explotación desmedida" para así "salvar la Amazonía".
"La historia nos observa y las futuras generaciones esperan ansiosas nuestro legado", aseguró. Asimismo, afirmó que "la explotación desmedida de recursos es un sistema fallido que ha causados daños irresponsables al planeta. Tenemos la oportunidad de cambiar la narrativa. Es la hora de encontrar el equilibrio entre desarrollo y protección del modelo natural".
Ecuador participa en esta Cumbre a solo días de celebrar, el próximo 20 de agosto, una histórica consulta nacional para cesar la extracción de petróleo en un yacimiento de la Amazonía, precisamente.
En tanto, la presidenta de Perú, Dina Boluarte, propuso en el cónclave una alianza "firme y clara" para frenar los delitos ambientales en la selva amazónica, especialmente la tala, la minería ilegal y el narcotráfico.
En su primer viaje al exterior desde que asumió la Presidencia de Perú, Boluarte defendió una “democracia efectiva” que incluya a los más vulnerables, entre ellos, “los pueblos indígenas”. Asimismo, alertó que la Amazonía "nunca antes ha estado tan amenazada como hoy" y que el propósito de la cumbre "no puede ser otro que su desarrollo, integral y sostenible".