Uno de los momentos más memorables de su carrera llegó en 1963, cuando fue parte fundamental de la Selección boliviana que ganó en el Sudamericano.
Ramiro Blacut, una leyenda del fútbol boliviano, falleció a los 80 años, dejando un profundo luto en el deporte nacional. Su partida, anunciada este lunes, marca el fin de una era en la que Blacut no solo brilló en Bolivia, sino también en el escenario internacional, donde se destacó como el primer sudamericano en vestir la camiseta del Bayern Múnich, uno de los clubes más prestigiosos de Europa.
Nacido en La Paz en 1944, Ramiro Blacut se inició en el fútbol desde temprana edad, mostrando un talento innato que pronto lo llevaría a las ligas más competitivas. Su carrera profesional comenzó en Bolivia, donde jugó para clubes icónicos como Bolívar, The Strongest, y Always Ready. Sin embargo, su habilidad en la cancha rápidamente captó la atención de los cazatalentos internacionales.
Uno de los momentos más memorables de su carrera llegó en 1963, cuando fue parte fundamental de la Selección boliviana que ganó el Campeonato Sudamericano (hoy Copa América) en un torneo que se disputó en suelo boliviano. Esta victoria sigue siendo una de las mayores hazañas del fútbol boliviano, y Blacut, como uno de los principales artífices de ese triunfo, se consolidó como un héroe nacional.
En la década de los 50, Blacut hizo historia al unirse al Bayern Múnich, convirtiéndose en el primer jugador sudamericano en fichar por el equipo bávaro. En una época en la que el fútbol europeo estaba dominado por jugadores locales, su incorporación no solo fue un logro personal, sino también un hito para el fútbol sudamericano. Durante su tiempo en el Bayern, Blacut se destacó por su técnica y visión de juego, características que lo convirtieron en un referente para el club y un ejemplo para futuras generaciones de futbolistas.
Además de su histórico paso por el fútbol alemán, Blacut también dejó su marca en otras ligas internacionales. Jugó para Ferro Carril Oeste en Argentina y Melgar en Perú, demostrando su versatilidad y adaptabilidad en diferentes entornos futbolísticos.
Ramiro Blacut no solo será recordado por sus logros en el campo de juego, sino también por su contribución al desarrollo del fútbol en Bolivia. Tras retirarse como jugador, Blacut continuó ligado al deporte, desempeñándose como entrenador y mentor para jóvenes futbolistas. Su pasión por el fútbol y su compromiso con el deporte lo convirtieron en una figura respetada y admirada en toda América Latina.
La noticia de su fallecimiento ha generado un profundo pesar en el mundo del deporte. Clubes, exjugadores, y aficionados han expresado su tristeza y han rendido homenaje a su legado a través de mensajes en redes sociales y medios de comunicación.
Ramiro Blacut deja un legado inmortal en el fútbol boliviano y sudamericano. Su vida y carrera seguirán siendo una fuente de inspiración para generaciones de futbolistas que aspiran a alcanzar el éxito tanto a nivel local como internacional.
La Paz/AEP