Exdirigentes alertan sobre estrategias de manipulación política, como la “guerra psicológica” y la victimización de algunos evistas para generar desestabilización.
En un contexto de reflexión política, César Guzmán, dirigente de la Central Obrera Regional de El Alto, instó a reestructurar el movimiento popular y rechazar la figura “mesiánica” de Evo Morales como solución para el país, para promover una mirada hacia nuevos liderazgos que permitan renovar los procesos.
“Es un momento histórico para reestructurar el movimiento popular; ya no se trata de fulano o sultano como protagonistas, sino de lo que el pueblo puede perder en este contexto de deliberación”, declaró el dirigente en el programa Dialogando con el pueblo, del sistema de Radios de los Pueblos Originarios (RPO).
Guzmán subrayó que los movimientos populares están atravesando un “ciclo de renovación” a través de diversas movilizaciones que, aunque generan conflictos y malestar, también propician “un momento de reflexión política para el surgimiento de nuevos liderazgos”.
En esta línea, destacó la importancia de eventos como el ampliado del Pacto de Unidad, las marchas de la Central Obrera Boliviana (COB) y de la Asamblea de la Alteñidad, entre otras manifestaciones que rechazaron los intentos de desestabilización del gobierno del presidente Luis Arce.
Señaló que incluso la llamada “marcha de la muerte”, que exigió la habilitación de Morales como candidato presidencial con un discurso falaz sobre escasez, ha provocado una reflexión en sectores que no participaron de manera consciente en la movilización que afirmaba que “Evo es la solución”.
En este contexto, Guzmán advirtió de que la figura de Morales ya no puede considerarse como el “salvador de la nación”. Más allá de sus esfuerzos por posicionarse como el “predestinado”, lo calificó de “mesiánico y totalmente antihistórico”.
Uno de los bloqueos convocados por el expresidente Morales. Foto: APG
Además, enfatizó en la postura de la Corte Interamericana, que busca aclarar la conducta de los líderes con relación a la reelección presidencial indefinida, y subrayó que, junto con lo que establece la Constitución Política del Estado, es fundamental para entender que la reelección no es un derecho humano.
Recordó que el pueblo boliviano ha construido respuestas colectivas incluso antes de 2003, un año clave en la defensa de los recursos naturales, y que el avance no se debe a la llegada de un único “salvador” como se ha presentado a Morales.
“Guerra psicológica”
Adalberto Ticona, exejecutivo de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), alertó de que Morales y sus seguidores, entre ellos Ponciano Santos, emplean un discurso de “guerra psicológica” para alarmar a la población y perjudicar la economía del país, buscando deslegitimar a la actual administración con el fin de facilitar su retorno al poder.
Maribel Ávalos, exdirigente de la Confederación Nacional ‘Bartolina Sisa’, lamentó que el dirigente evista David Mamani intente victimizarse al afirmar que está hospitalizado en Achacachi, debatiéndose entre la vida y la muerte, cuando investigaciones de las RPO confirmaron que nunca estuvo en dicho nosocomio.
La Paz/AEP