La medida busca frenar el desabastecimiento de alimentos y contener la escalada de precios que afecta a la población más vulnerable.
El presidente Luis Arce instruyó ayer operativos conjuntos entre la Policía Boliviana y las Fuerzas Armadas para desbloquear la carretera Oruro–Cochabamba y otras rutas troncales del país, tomadas por sectores afines a Evo Morales.
La medida busca frenar el desabastecimiento de alimentos y contener la escalada de precios que afecta a la población más vulnerable.
“Hemos instruido, tanto a la Policía Boliviana, a través de nuestro ministro de Gobierno (Roberto Ríos), como a nuestras Fuerzas Armadas, mediante el ministro de Defensa (Edmundo Novillo), llevar adelante un operativo para desbloquear la carretera Oruro – Cochabamba. Esta acción responde al clamor del pueblo boliviano que se ve afectado por estos bloqueos que golpean su economía”, expresó Arce en conferencia de prensa desde la Casa Grande del Pueblo.
El mandatario afirmó que los operativos se extenderán progresivamente en todo el país, en respuesta a los efectos negativos que los bloqueos generan sobre el abastecimiento y la economía nacional. Señaló que estos actos son impulsados por el interés personal de Evo Morales, con el objetivo de desestabilizar su gestión.
“Lo único que pretende, como ya lo hemos advertido en reiteradas oportunidades, es habilitar una candidatura inconstitucional del señor Evo Morales. Lamentamos profundamente que intereses personales vuelvan a poner en riesgo la vida y la economía del pueblo boliviano”, remarcó.
Violencia desatada por el evismo en Llallagua deja decenas de heridos. | Foto: RRSS
Durante la jornada, se reportaron los primeros operativos de desbloqueo en el sector de Parotani (Cochabamba) y en Llallagua (Potosí), donde las fuerzas del orden restablecieron la circulación vehicular en tramos estratégicos de la red vial fundamental.
Según reportes de medios locales, los bloqueos han provocado el incremento del precio de productos como la papa, el tomate y la carne de pollo en mercados de El Alto, La Paz, Cochabamba y otras ciudades del país. Las asociaciones de comerciantes y gremiales expresaron su respaldo a las acciones del Gobierno y exigieron una pronta solución al conflicto.
El viceministro de Seguridad Ciudadana, Mario Durán, informó que los operativos se desarrollan bajo protocolos para evitar enfrentamientos, priorizando el diálogo, pero actuando con firmeza ante acciones violentas.
“El pueblo no puede ser rehén de intereses políticos. Estamos actuando dentro del marco legal para restituir el orden y garantizar la libre transitabilidad”, aseguró.
Mientras tanto, sectores afines a Evo Morales anunciaron que mantendrán las medidas de presión y denunciaron una supuesta persecución política. El exmandatario no se pronunció directamente sobre los operativos, pero desde el ala radical de su partido advirtieron con nuevas movilizaciones.
Desde el Órgano Ejecutivo, se reiteró el llamado a la pacificación y al respeto al derecho de todos los bolivianos a circular libremente, sin coerciones ni chantajes políticos. Arce insistió en que su gobierno continuará garantizando el abastecimiento y evitará que el país retroceda en estabilidad social y económica.
AEP
