La Ministra de la Presidencia exigió que esa institución revele la lista de sacerdotes que tienen antecedentes de violencia sexual.
La Paz, 19 de mayo de 2023 (AEP).- Plataformas y colectivos de La Paz, Cochabamba y Santa Cruz protestaron ayer frente a diferentes oficinas de la Iglesia Católica en repudio a los casos de pederastia que se hicieron públicos recientemente. La Ministra de la Presidencia exigió que esa institución revele la lista de sacerdotes que tienen antecedentes de violencia sexual.
Las puertas de la oficina de la Compañía de Jesús, así como aquellas del Seminario San Gerónimo, entre otras instalaciones en La Paz, fueron escenario de protestas en las que participaron organizaciones defensoras de derechos humanos, plataformas feministas y de padres de familia que repudiaron con indignación la lluvia de casos de pederastia que se conocieron a través de los medios de comunicación.
Los cánticos que entonaron quienes se ubicaron en la calle Genaro Sanjinés, donde también se encuentran las oficinas de radio Fides, pedían la salida de la Compañía de Jesús del país y recordaban las atrocidades que lastimaron a cerca de 85 niños, cifra que crece cada vez más.
“Si Espinal viviera, denunciando estuviera”, “Ni confesión ni perdón, curas al paredón”, podía escucharse a cuadras a la redonda.
Valeria Quintanilla, una de las manifestantes, señaló que la indignación fue el principal motivo para que decidiera salir a protestar. Exigió que se identifique a los involucrados y que la Iglesia Católica cese en sus intentos de encubrimiento.
“Es impresionante el poder que tienen, entre otras cosas, gracias a los medios de comunicación que manejan; escucho radio Fides y lo único que escucho son tergiversaciones; después de la intervención a sus oficinas ayer (miércoles) se han mostrado indignados, no puede ser”, dijo.
Por su parte, Maya Berzaín cuestionó los beneficios de los que aún goza la Iglesia y su postura en lo que respecta a la educación sexual integral, que se ha unido a los contenidos de la malla curricular desde esta gestión.
“Tergiversan los contenidos de la educación sexual y se oponen a que los niños la reciban. Cuestionamos por qué, ¿tal vez porque prefieren que los menores de edad permanezcan en la ignorancia para que no denuncien estos hechos?”, reflexionó.
Manifestaciones similares se reportaron en Santa Cruz de la Sierra y también en Cochabamba, donde padres de familia mostraron su indignación y las plataformas ciudadanas hicieron conocer su malestar y repudio.
Por su parte, la ministra de la Presidencia, María Nela Prada, recalcó que el país hará valer su soberanía y los derechos de los niños a vivir sin violencia. Para ello exigió que se publique una lista de sacerdotes con antecedentes de todo tipo de violencia sexual.
“Hemos señalado de manera contundente: el Estado Plurinacional de Bolivia no es un basurero de violadores, no vamos a permitir que sigan enviando a sacerdotes que tienen antecedentes de violación en otros países, a educar a nuestros niños. Necesitamos ponerle freno a esto. El Vaticano tiene que dar a conocer una lista de sacerdotes que tengan antecedentes de este tipo de actos, porque no deberían desarrollarse como educadores ni guías espirituales en ningún lugar, deben estar en la cárcel”, aseveró en una entrevista con Bolivia TV.
Según la autoridad, este pedido ya está siendo elaborado tanto por el Ministerio de la Presidencia como por la Cancillería.
La ministra de la Presidencia, María Nela Prada, presentó un anteproyecto de ley que busca castigar a los involucrados en hechos de pederastia.
Prada también cuestionó que la Iglesia mantenga un “manto” para ocultar los delitos sexuales cometidos por miembros de su institución, trasladándolos a otras naciones, donde vuelven a cometer estos actos.
Para proteger a las víctimas de estos hechos —“que en muchos casos les arruinan la vida”—, Prada preparó un anteproyecto de ley que lucha contra la impunidad en delitos sexuales contra infantes, niños, niñas y adolescentes.
Los cuatro pilares de esta norma serían, la imprescriptibilidad de este tipo de hechos, el aumento de la pena para los delitos de pederastia, la obligatoriedad de las instituciones a investigar y la conformación de la Comisión de la Verdad.
En esta última intervendrían los ministerios de la Presidencia, Justicia y Gobierno; de los presidentes de las cámaras de Diputados y Senadores; el Fiscal General del Estado, la Procuraduría, Defensoría del Pueblo, además de representantes del Tribunal Supremo de Justicia, el Consejo de la Magistratura y Tribunal Constitucional Plurinacional.
La Iglesia encubrió por más de 22 años el abuso de curas bajo el ‘arco del olvido’ y no evitó el dolor de niños
Fue en 2001 cuando el exjesuita Pedro Lima, quien llegó recientemente desde Paraguay para declarar en el caso de pederastia en Bolivia, denunció ante el provincial de los jesuitas Ramón Alaix los abusos cometidos por los sacerdotes españoles Alfonso Pedrajas, Luis Tó —enviado este a Bolivia tras ser condenado por pederastia en España— y Antonio Gausste Capdevila, alias ‘Tuco’.
Sin embargo, el alto clérigo de la Iglesia Católica hizo oídos sordos e incluso lo expulsó de esa orden religiosa.
“Yo pensé que iba a ser escuchado, pero la reacción fue contraria, me expulsaron y sancionaron, tal vez como una forma de acallar las denuncias. Si en 2001 me hubieran escuchado y hubieran procesado a los responsables enviándolos a la justicia ordinaria, cuánto dolor se hubiera ahorrado al país”, expresó Lima en contacto con los medios de prensa en Cochabamba.
Ahora, luego de más de 22 años de silencio, el exjesuita prestó su declaración en la Fiscalía de Cochabamba, donde presentó pruebas en el caso de abuso sexual cometido por el jesuita español Pedrajas. Lo mismo hará en La Paz contra otros curas.
Lima explicó que sí hizo pública su denuncia en 2002, pero el poder judicial estaba “controlado” por uno de los involucrados.
Pedro Lima, principal testigo del caso curas pederastas en Bolivia.
También denunció el hecho a un exprovincial y exsuperior asistente de América Latina Septentrional, quien además era la mano derecha del general de los jesuitas Adolfo Nicolás, pero no se hizo nada al respecto.
El exjesuita es considerado un testigo clave en este caso y por ello se presentó ayer ante la Fiscalía.
Al concluir su declaración manifestó que toda la población boliviana es víctima de la Iglesia Católica por haber faltado a la confianza de sus feligreses.
“Víctimas somos toda la población boliviana por lo que han significado tantos años de impunidad (…) esperemos que sirva al proceso que estoy impulsando para que estos temas no queden en la impunidad y que se repare el daño causado especialmente al grupo de los exalumnos del Juan XXIII, y que esto no se repita nunca más en el país”, recalcó.
Otro vejamen develado por otro exjesuita es el del cura Luis Roma, más conocido como ‘Lucho’ Roma, fallecido, quien tenía imágenes de niños y niñas indígenas de Charagua, Santa Cruz, desnudos, a quienes les realizaba toques impúdicos. Las imágenes datan de 1994 y 2004, según el diario El País.
De acuerdo con este jesuita, de quien no se revela su identidad, tanto Roma como Pedrajas gozaban de una protección en una acción denominada “arco del olvido”.
“El mundo ve pues al padre como una persona importante, no va a pensar que le va a sacar fotos, tocar a sus hijos y no quiere denunciarlos. Por esta misma razón el padre Pedrajas y el padre Roma pasaban por el arco del olvido, porque la gente no quiere denunciar a la Iglesia Católica”, señaló.
Al momento, según la Compañía de Jesús, la Fiscalía abrió procesos contra tres sacerdotes por abuso sexual a menores de edad. (M.H.)
Envían a la cárcel a cura acusado de abuso
El párroco Milton M. fue enviado a la cárcel con detención preventiva por la denuncia de abuso sexual de una exseminarista. Es el primer religioso enviado a prisión, tras una serie de denuncias de pederastia en contra de jesuitas.
La fiscal departamental de Tarija, Sandra Gutiérrez, informó que la decisión fue tomada en la audiencia de medidas cautelares del cura, que fue aprehendido el miércoles en inmediaciones de la iglesia San Roque.
Él fue denunciado por el delito de abuso sexual agravado en contra de una exseminarista. El hecho ocurrió en 2014 y, pese a la denuncia a los superiores del sacerdote, el caso se mantuvo en reserva. Deberá permanecer tres meses en el recinto penitenciario.
Se conoce que hay más de 30 víctimas del ahora detenido. Se constituye en el primer cura encarcelado, en medio de un escándalo de abusos sexuales de religiosos, como algunos de la Compañía de Jesús.
El ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, dio cuenta el miércoles de la aprehensión del religioso y advirtió que no habrá impunidad en delitos de violencia sexual.
“Se informa al pueblo boliviano de la aprehensión del párroco Milton Murillo, padre de la iglesia San Roque de Tarija, por el delito de abuso sexual agravado. No habrá impunidad de ningún tipo, y menos aún en casos de esta naturaleza”, aseguró. en un tuit.