Algunos departamentos sufren por la sequía que amenaza tanto a las zonas rurales, y su producción, como a la población urbana.
La Paz, 06 de septiembre de 2023 (AEP).- El fenómeno climático El Niño llegó al país y deja sequía a su paso. En Potosí la población ya está sufriendo racionamiento, mientras que en Sucre las localidades rurales han optado por lo mismo. En La Paz se garantiza el suministro, pero se pide el uso responsable del recurso.
Los potosinos sufren ya de escasez, lo que provocó que el gerente general de la Administración Autónoma para Obras Sanitarias (Aapos) de Potosí, Carlos Chumacero, anunciara entre lágrimas que queda menos del 20% del recurso almacenado.
“Estamos con un volumen de almacenamiento por debajo del 20%. Actualmente estamos con 100 litros por segundo (la mitad de lo requerido). A nuestra población potosina: enfrentaremos nuevamente esta sequía como seres humanos valientes, con lo que tenemos y con lo que podemos”, dijo recientemente.
Vecinos de la zona Entre Ríos de esta urbe expresaron ayer su preocupación por la falta de agua en el lugar los últimos tres días.
“En este sector no tenemos conexiones a domicilio, son piletas públicas y prácticamente estos tres últimos días no ha llegado ni una gota a estas piletas públicas, entonces la necesidad del agua esta crítica. Estamos muy preocupados porque en este sector hay familias humildes. El agua es un derecho humano, el agua no puede faltar en el hogar”, dijo afligido un vecino de Entre Ríos a Unitel.
La capital del país reportó el lunes una disminución preocupante de más del 50% del caudal de Cajamarca, que abastece al 10% de la capital. Mientras que, por lo menos, cuatro municipios tuvieron que tomar la decisión de seguir los pasos del pueblo potosino e iniciar un racionamiento del agua. Entre ellos están Yamparáez, Padilla, Villa Serrano y Camargo, reportó el diario Correo del Sur.
Según reportaron sus autoridades, en algunos casos el racionamiento comenzó a mediados de agosto y la provisión de agua para su consumo se redujo incluso a dos veces por semana.
Por su parte, el interventor de la Empresa Pública Social de Agua y Saneamiento (Epsas), Jaime Gutiérrez, recomendó ayer a la población hacer su parte en lo que respecta a un uso medido de este recurso. También aseguró que el abastecimiento tanto para La Paz como para El Alto está asegurado por siete meses, ya que se cuenta con 34 millones de metros cúbicos de agua en las represas.
“Epsas sigue trabajando con el abastecimiento de agua. No solo son los pozos que vamos a perforar en la ciudad de El Alto, sino también vamos a tomar el bombeo de otros lugares, por ejemplo de Huayllara. Es una estación donde nos suministra agua por bombeo para la represa de Incachaca”, dijo.
