El nosocomio de tercer nivel trabaja en procedimientos de radiofrecuencia sin incisión ni hospitalización para mejorar la calidad de vida de pacientes con enfermedades crónicas.
El Sistema Único de Salud (SUS) amplió su cobertura en el tratamiento del dolor crónico en el Hospital de Tercer Nivel Montero mediante procedimientos de radiofrecuencia en una unidad especializada en el tratamiento del dolor que abrió sus puertas a una nueva esperanza para quienes conviven día a día con sufrimiento.
“Este servicio está abierto a todos los pacientes que sufren de dolor crónico en articulaciones, columna, con cáncer, enfermedades degenerativas y/o crónicas que derivan en síndromes dolorosos. Nuestro objetivo es mejorar su calidad de vida”, explicó la jefa del Servicio de Anestesiología, Dolor y Reanimación, Angélica Luna Orozco De Alencar, según información institucional.
Sin hospitalización
El Servicio de Anestesiología, Dolor y Reanimación del hospital montereño marcó un hito con la primera intervención de radiofrecuencia en la nueva Unidad del Dolor en Montero, que brinda un servicio especializado con una medicina más humana y de alta tecnología, después de efectuar su primer procedimiento de radiofrecuencia de los nervios geniculados de la rodilla con una técnica de vanguardia en medicina intervencionista, sin incisión, sin hospitalización y de forma gratuita con el SUS.
El primer caso tratado en el hospital norteño es el de una mujer de 70 años, que, a través de la intervención de radiofrecuencia, se desactivaron los nervios responsables del dolor, permitiéndole una mejor movilidad y descanso, sin necesidad de incisión quirúrgica.
“Usamos una tecnología mínimamente invasiva. El procedimiento se hace guiado por ecografía y rayos X, con radiofrecuencia caliente, y en este caso también aplicamos ozonoterapia. El paciente llega y se va a su casa el mismo día”, detalló el médico subespecialista en algología intervencionista y anestesia regional, Gerson Lima Bravo.
Atención para más de 3.000 personas
Este nuevo servicio está dirigido a pacientes con enfermedades crónicas que cursan síndromes dolorosos: artrosis, cáncer, diabetes, hipertensión, enfermedades renales, problemas de columna, entre otras patologías degenerativas.
“Estamos abiertos a toda la población que lo necesite. En el norte cruceño estimamos que 3.800 personas por año necesitan de este tipo de atención”, afirmó Angélica Luna Orozco, quien cuenta con formación especializada en tratamiento del dolor.
El Hospital de Montero es el primero de tercer nivel y segundo hospital público de Santa Cruz, después del Instituto Oncológico del Oriente Boliviano, en ofrecer procedimientos de radiofrecuencia en una unidad especializada en el tratamiento del dolor con una medicina más humana y de alta tecnología a la que se puede acceder de forma gratuita gracias al SUS.
AEP