La organización social es considerada un baluarte de la lucha sindical.
El presidente Luis Arce participó del aniversario de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), ocasión en la que rindió homenaje a sus líderes históricos y subrayó la importancia de la organización en la vida política y social del país.
Durante su intervención, el mandatario recordó que la CSUTCB no nació por casualidad ni por concesión de ningún poder, sino como respuesta a siglos de exclusión, opresión y resistencia. “Nuestra organización surgió de la necesidad de defendernos”, dijo, frente a una multitud de dirigentes, exdirigentes y bases campesinas reunidas en el acto conmemorativo.
Arce afirmó que la CSUTCB se mantuvo firme frente a gobiernos neoliberales, defendiendo los derechos del movimiento campesino incluso en los momentos más oscuros. Para él, la historia de esta organización se escribió con manos callosas, con lucha y dignidad.
“El movimiento campesino sostuvo las banderas de la revolución”, expresó y, a lo largo de su discurso, el Presidente reiteró que la CSUTCB no fue solo una organización sindical, sino que se constituyó en una escuela de vida donde se sembraron principios de unidad, solidaridad y compromiso con la historia de Bolivia.
Arce también se refirió a las amenazas que enfrentó el proceso de cambio. Mencionó a enemigos externos como el imperialismo, las oligarquías y la derecha; pero también habló de los peligros internos, encarnados en la división al interior de las organizaciones campesinas, que solo favoreció a quienes buscaron debilitar el movimiento popular. “Quieren que dejemos de reconocernos como hermanos. Y eso no podemos permitirlo”, advirtió.
Con voz firme, exhortó a mantener la unidad y a rechazar los intentos de fragmentación sindical. Además, hizo un llamado especial a las juventudes campesinas para que se involucren activamente en la formación de nuevos cuadros políticos.
AEP
