Debido a la coyuntura, se vierten diversas opiniones, en algunos casos impulsando conceptos inadecuados del contexto económico, como es el caso del “corralito” que se estaría desarrollando en nuestro país, entremezclando diversos temas y vinculándolo a una supuesta inestabilidad del sistema financiero, con la única finalidad de generar incertidumbre, en una época preelectoral.
Pero vayamos por partes, es importante conocer la situación del sistema financiero para comprender a plenitud aspectos inherentes al mismo, reconociendo que los resultados alcanzados no son producto de la inercia ni obra de piloto automático alguno, son el resultado de medidas y gestión que se realiza mediante la regulación, supervisión y control por parte de la autoridad competente.
Este hecho es corroborado por las cifras del sistema financiero de la pasada gestión, mismas que denotan que se cuenta con un sistema financiero estable, pese al contexto externo e interno complejo y los conflictos sociopolíticos que atravesó nuestro país. Las principales variables como los depósitos y créditos tuvieron un significativo crecimiento de 5,2% y 4%, respectivamente. Se resalta el impacto que significó el crédito de vivienda de interés social para las familias beneficiadas que llegaron a más de 101 mil, por su parte, se incrementó el número de cuentas en 8,3% por la confianza y la cultura de ahorro, el nivel de liquidez que llegó a 66% superior a los estándares internacionales (40%), con un índice de mora de 3,2% inferior al promedio regional (3,5%). Producto de la instrucción emitida por parte de la Autoridad de Supervisión, las Entidades de Intermediación Financiera capitalizaron un porcentaje de sus utilidades, por lo que lograron fortalecer su patrimonio, medida que permitió acompañar el crecimiento de la economía, con niveles de solvencia adecuados y preservando la estabilidad del Sistema Financiero.
Esta información es parte de los resultados de la pasada gestión, la cual refleja un sistema financiero sólido y solvente, aspectos favorables que contribuyen en la confianza que tiene la población pese al contexto complejo, mostrando con objetividad la realidad del sistema financiero y desvirtuando cualquier opinión con relación a la confianza al mismo.
Por otra parte, la idea de “corralito”, que algunos analistas pretenden instalar mediáticamente, no encuentra asidero, debido a que en términos generales es entendido como una restricción temporal impuesta por el gobierno que impide la libre disposición del dinero, aspectos que de ninguna manera se aplican en nuestro país y mucho menos una conversión obligatoria. Las entidades financieras y sus clientes tienen contratos en los cuales establecen los términos para el uso de sus recursos, lo que le permite acceder libremente a los mismos, obviamente con las restricciones referidas a las actividades ilegales y el lavado de dinero, dispuesto por organismos internacionales, de los cuales nuestro país es parte.
Lo que es peor aún es que mediante estos mensajes, se incita a la población para que saque su “plata” del sistema financiero, cometiendo de esta manera un delito financiero por la difusión de información financiera falsa, misma que incita al retiro masivo de depósitos de las entidades financieras.
La escasez de divisas en la actividad económica de nuestro país, no debería ser objeto de mayor especulación por personas o medios de comunicación, al contrario, sería importante que, tratándose de temas sensibles para la población, se debería pensar en el bien mayor y no generar incertidumbre ya que no existe la necesidad de retirar recurso alguno, más al contrario es el momento de fortalecerlo para cualquier futura contingencia.
Por: Gustavo Gómez/