Encuéntranos en:
Búsqueda:

Sdenka Saavedra Alfaro

Irán y la resistencia latinoamericana

No cabe duda que la lucha por la profundización de los lazos de integración en defensa de un frente común multipolar enmarcado en la protección de los recursos naturales frente a las injerencias del terrorismo hegemónico estadounidense y europeo, es un pilar fundamental y prioritario en la política exterior de todos los pueblos que enmarcan su resistencia ante los duros golpes asfixiantes de las sanciones inhumanas; así como los bloqueos injustos de las presiones del imperialismo.

En esa visión multilateralista en apoyo a las demandas de libertad e independencia de las naciones oprimidas del mundo, frente a la crueldad de países arrogantes, es que recobra gran importancia la primera gira del presidente de Irán, Ebrahim Raisi, a Latinoamérica, misma que comenzará este 11 de junio de 2023, en su visita a Venezuela, luego a Nicaragua y a Cuba, contemplando la visión de los 44 años de resistencia que tiene la República Islámica de Irán, como soporte al progreso económico, político y científico de los países de la Patria Grande.

Países que son tildados como “eje del mal”, o de “terroristas”, los que se encuentran sancionados, bloqueados por el Gobierno de Estados Unidos, la UE y sus aliados, los que resisten como la República Bolivariana de Venezuela que se encuentra de pie frente a las más de 1.000 sanciones que agudizaron la crisis económica en 2015, un castigo colectivo a la población civil, tal como se describe en las convenciones internacionales de Ginebra y La Haya, siendo ilegales según el derecho internacional y los tratados que ha firmado EEUU, y parecería ser que también violan la legislación estadounidense, una política también de robo y saqueo; pues no se ha devuelto las 32 toneladas de reserva de oro al pueblo venezolano, siendo el país con las mayores reservas de petróleo en Latinoamérica.

Así también resiste Cuba, con sus más de 60 años de embargo comercial ilegal estadounidense, impidiendo el desarrollo del comercio internacional y privando a la isla de inversiones extranjeras; sin embargo, también su resistencia la vemos firme en su política antimperialista, siendo un ejemplo para todos los países libres del mundo y dejando atrás políticas monroistas.

De igual forma Nicaragua, país que resiste el severo embargo impuesto de 1980 y las sanciones ilegales de Estados Unidos y países europeos, y las más actuales al prohibirle a los ciudadanos estadounidenses hacer negocios con la industria aurífera del país centroamericano, amenazando con restricciones comerciales y retirándole las visas a unos 500 allegados del Gobierno; toda una confabulación terrorista contra el país que lucha por caminos libres.

En esa línea, el país que alega ser el ejemplo de democracia y libertad, es el que más sanciones en el mundo ha aplicado junto con su política de intervenciones militares —más de medio siglo de intervenciones en América Latina—. Además de ello, Estados Unidos es el causante de la mayor inmigración hacia su país del “sueño americano”, más de 2,7 millones de migrantes en 2022, justamente por las crisis que ellos mismos han causado, hambre, miseria y muerte.

Ante toda esta política demonizadora y cruel de embargos, contra los países que velan por el interés de los pueblos, como dar salud o educación gratuita; hoy es de vital importancia la lucha de los pueblos con una visión antiimperialista, que vela por el derecho de todos los actores internacionales, y por el fortalecimiento de las relaciones con el país de los Ayatolas que colabora y alivia las sanciones y los golpes híbridos que EEUU y Europa propinan contra Venezuela, Cuba o Nicaragua, países a los cuales actualmente coopera enviando ayuda; como la llegada de tanqueros de gasolina a la Venezuela bloqueada, la asistencia en materia petrolera, energética, agraria y ganadera a Nicaragua, o a Cuba en materia pesquera, biotecnológica y de recursos hídricos.

Recientemente, Irán presentó su primer misil balístico hipersónico construido en el país, llamado Fattah (literalmente “el abridor”) por el propio Líder de la Revolución Islámica, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, ocupando los primeros lugares del mundo en tecnología, la cual puede ser aprovechada por la Patria Grande ante el enemigo y su visión totalitarista, que solo piensa en la posesión de riqueza de unos y no de todos.


Imprimir   Correo electrónico

Ahora El Pueblo logo

Búsqueda