La intención de voto por Lula (Partido de los Trabajadores) en las elecciones de 2026 aumentó entre junio y julio, según una nueva encuesta de AtlasIntel publicada este jueves 31. El avance del Partido de los Trabajadores en la carrera por la reelección coincide con la reacción a la subida de aranceles impuesta por Donald Trump a los productos brasileños. Según la encuesta, Lula lidera en los tres escenarios de primera vuelta en los que se menciona su nombre. También tiene ventaja sobre todos los oponentes menciona- dos en posibles segundas vueltas.
Esta situación es más cómoda que en junio, cuando, por ejemplo, quedó por detrás de Jair Bolsonaro (Partido de los Trabajadores) tanto en la primera como en la segunda vuelta. El candidato del Partido de los Trabajadores también estaba técnicamente empatado con Michelle Bolsonaro (Partido de los Trabajadores) y Tarcísio de Freitas (Republicanos) en posibles contiendas directas. Esta vez, sin embargo, Lula tiene una ventaja de 3,6 puntos sobre Bolsonaro si ambos se presentan en la primera vuelta. También vencería al expresidente si pa- san a la segunda vuelta. Cabe destacar que el excapitán no está habilitado para presentarse como candidato en 2026.
Brasil registró una tasa de desempleo del 5,8% en el segundo trimestre de 2025, la más baja desde que comenzó la Encuesta Nacional por Muestreo de Hogares (PNAD Continua) en 2012. Los datos fueron publicados el jueves (31) por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE). En comparación con el trimestre que finalizó en marzo, cuando la tasa fue del 7%, se observó una caída de 1,2 puntos porcentuales. En términos interanuales, la caída fue de 1,1 puntos porcentuales, alcanzando el 6,9% en el mismo período de 2024. El número total de desempleados en el país asciende actualmente a 6,3 millones, lo que representa una disminución del 17,4% con respecto al trimestre anterior, lo que significa que 1,3 millones menos de personas buscan trabajo. En un año, la caída fue del 15,4%, con 1,1 millones de personas que dejaron el desempleo.
En términos de empleo, Brasil alcanzó un nuevo récord: 102,3 millones de personas estaban empleadas en el trimestre finalizado en junio, lo que representa un aumento del 1,8% con respecto a los tres meses anteriores, con la creación de 1,8 millones de nuevos empleos. El crecimiento interanual fue del 2,4%, totalizando 2,4 millones de personas empleadas.
Como resultado, la tasa de empleo —que mide la proporción de personas empleadas respecto a la población en edad laboral (14 años o más)— alcanzó el 58,8%, con un aumento de 0,69 puntos porcentuales en el trimestre y de 1 punto porcentual en el año. La fuerza laboral, que abarca tanto a las personas empleadas como a las desempleadas, aumentó un 0,5%, totalizando 108,6 millones de personas. La población fuera de la fuerza laboral se mantuvo estable en 65,5 millones.
El empleo formal en el sector privado también alcanzó cifras récord. El número total de trabajadores formales e informales alcanzó los 52,6 millones, lo que representa un aumento del 1,3% en el trimestre y del 2,7% en el año. De este total, 39 millones tienen empleo formal, la cifra más alta registrada hasta la fecha, con aumentos del 0,9% en el trimestre (357.000 personas más) y del 3,7% en el año (1,4 millones de trabajadores). El número de trabajadores informales ascendió a 13,5 millones, lo que representa un aumento del 2,6% en el trimestre (338.000 personas), pero se mantuvo estable interanual. La tasa de subutilización de la fuerza laboral, que incluye a las personas desempleadas, subempleadas y quienes podrían trabajar pero no están disponibles, descendió al 14,4%, el nivel más bajo de la serie histórica.
El ingreso real habitual alcanzó un máximo histórico en la serie histórica, llegando a R$ 3.477 ($us 620). El aumento en el trimestre fue del 1,1%. Interanualmente, el crecimiento fue del 3,3%. El ingreso real habitual también alcanzó un máximo histórico, estimado en R$ 351.200 millones($us 62,678 millones). Esta cifra representó un aumento del 2,9% en comparación con el trimestre anterior y del 5,9% en comparación con el mismo trimestre del año pasado. Tras una recesión electoral a principios de año, Lula parece tener una sólida candidatura a la reelección, gracias en gran medida al bajo desempleo. Debería estar políticamente agradecido a Trump, pero en el ámbito económico, enfrentará una larga batalla con el presidente estadounidense.
El aumento de aranceles de Trump fue otro golpe para Bolsonaro. Lula está agradecido.
Por: Tulio Ribeiro