Uno de los trabajadores del campo cañero Cotoca contó: “A nosotros los zafreros nos pagan 30 bolivianos por una tonelada de caña, mientras más tallos juntamos, nos pagan más; pero no es fácil trabajar así, no tenemos sueldo, así nomás nos pagan”.
La Paz, 02 de julio de 2023 (AEP).- En una inspección de campo, el Ministerio de Trabajo verificó que los derechos laborales de los trabajadores de la zafra son vulnerados en el departamento de Santa Cruz, por lo que se requirió subsanar las observaciones que van contra las normas vigentes.
Inspectores de la Jefatura Regional de Trabajo Montero (Santa Cruz) llegaron hasta el municipio de Fernández Alonso, donde existen grandes plantaciones de caña de azúcar; allí se pudo constatar que los zafreros no tienen las condiciones adecuadas para esa dura faena, según una nota de prensa institucional.
Los cañaverales son inmensos —de 50, 60 y más hectáreas— y ni los dueños de estos ni los contratistas dotan a los zafreros de ropa adecuada para su labor y tampoco les brindan seguro de salud.
“Ellos trabajan más de ocho horas a pleno sol y con el clima sofocante que bordea los 40 grados”, explicó el inspector de la Unidad de Derechos Fundamentales (UDF), dependiente del Ministerio de Trabajo, Lucio Rodríguez.
Uno de los trabajadores del campo cañero Cotoca contó: “A nosotros los zafreros nos pagan 30 bolivianos por una tonelada de caña, mientras más tallos juntamos, nos pagan más; pero no es fácil trabajar así, no tenemos sueldo, así nomás nos pagan”.
El periodo de la cosecha de caña, conocido como zafra, es intenso en mano de obra. La realizan trabajadores temporales para el dueño o para un subcontratista, este último generalmente paga menos de 30 bolivianos por tonelada. Dependiendo de la zona, la cosecha se realiza durante la época seca y entre cuatro y seis meses, explicó el inspector David Valencia.
En el cañaveral Chuchía, otro empleado explicó que el trabajo en la zafra “es muy duro” y que el propietario no paga a los zafreros con puntualidad y tampoco les dota de ropa adecuada y botas.
El artículo 5 de la Ley General del Trabajo señala que el contrato laboral puede ser individual o colectivo, mientras que el artículo 6 establece que el contrato puede “celebrarse verbalmente o por escrito”.
