Integrantes de colectivos de la sociedad civil y diplomáticos resaltaron la importancia de formar parte de esa entidad que ha tomado fuerza en los últimos tiempos.
Representantes de organizaciones sociales de Ecuador expresaron su apoyo a la reactivación de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), aunque el gobierno del presidente Guillermo Lasso muestre desinterés por ese bloque de integración.
En un encuentro realizado la noche de ayer en Quito, Ecuador, integrantes de colectivos de la sociedad civil y diplomáticos resaltaron la importancia de formar parte de esa entidad que ha tomado fuerza en los últimos tiempos con el regreso de Brasil y Argentina.
En representación de la Coordinadora por la Paz, la Soberanía, la Integración y la No Injerencia (CPAZ), Marcelo Orellana afirmó que los países latinoamericanos tienen una historia común y Unasur es una herramienta geopolítica para poner fin a la colonización.
Subrayó que la organización regional permite la convergencia de los pueblos del área alrededor de objetivos comunes, como la búsqueda de justicia social, y posibilita fomentar la identidad latina.
El representante legal de Venezuela ante Unasur, Elvis Urbina, aseguró que a pesar de los “días oscuros”, ese organismo nunca dejó de tener vigencia desde el punto de vista del derecho internacional.
Urbina se refirió a la necesidad de buscar mecanismos de consulta popular para que la decisión de pertenecer o no al bloque suramericano no dependa de la decisión de un mandatario, sino de todos los pueblos latinoamericanos.
A su turno, el representante de Ecuador ante Unasur entre 2013 y 2016, Jorge Acosta, recordó cómo hace unos años la integración incomodaba porque ponía en riesgo el proyecto neoliberal y corporativo.
Aunque reconoció problemas internos del bloque regional, como la comunicación, destacó sus logros en materia de cooperación económica, energética, política y de salud.
Sin embargo, para la exparlamentaria andina Rosa Mireya Cárdenas el actual contexto mundial es como un segundo aire para dar sustento a cualquier proceso integracionista. Sentenció que el Estado ecuatoriano debe volver a ser parte de Unasur.
En 2019, por decisión del entonces gobernante Lenín Moreno, Ecuador salió del bloque y el edificio construido para su sede, ubicado justo en la mitad del mundo, está totalmente abandonado.
Urbina comentó cómo gracias a la actitud del Gobierno de Argentina los bienes patrimoniales de esa institución se encuentran preservados en la Casa Patria Grande, en Buenos Aires.
Reunión
A propósito de esta petición que hacen en Ecuador, el presidente Alberto Fernández dialogó ayer con su par brasileño, Luiz Inácio Lula Da Silva, a través de una videoconferencia en la que abordaron la situación comercial bilateral en el marco de los acuerdos firmados en la reunión que mantuvieron el 23 de enero en Buenos Aires y el rol de la Unasur.