El equipo de Luis de la Fuente llegó con puntaje ideal, tras vencer a Croacia (3-0), Italia (1-0), Albania (1-0) y Georgia (4-1).
España recibió el premio que muchas veces obtiene el equipo que busca jugar al fútbol. Desde el inicio se mostró más ambiciosa que Alemania y la eliminó de ‘su’ Eurocopa en una verdadera batalla, ayer en el MHPArena de Stuttgart.
El equipo de Luis de la Fuente llegó con puntaje ideal, tras vencer a Croacia (3-0), Italia (1-0), Albania (1-0) y Georgia (4-1), pero enfrente tenía al que pintaba como un cuco, el anfitrión, dirigido por Julian Nagelsmann, que también venía invicto: 5-1 a Escocia, 2-0 a Hungría, 1-1 con Suiza y 2-0 a Dinamarca.
Sin dudas se trató de un duelo de candidatos, el seleccionado que más había convencido, por el juego exhibido y por los rivales a los que había sometido, era el de España. Y la Furia Roja lo demostró desde el primer minuto, en el que llegó con un remate de Pedri.
El volante fue protagonista de la etapa inicial, porque Toni Kroos le cometió una durísima infracción a los 3 minutos y lo sacó de la cancha, lesionado. La RFEF informó que se trata de un esguince lateral interno en su rodilla izquierda, por lo que se perdería el resto de la Eurocopa.
En el primer tiempo, España llegó en un par de ocasiones por Dani Olmo, quien reemplazó a Pedri y fue la gran figura, y por los intentos de Lamine Yamal y Nico Williams, los mejores del conjunto de De la Fuente en el torneo.
Alemania, por su parte, amagó mediante Kai Havertz, siempre movedizo en el ataque, pero su plan de juego se basó en cortar los circuitos del rival. Nagelsmann resignó la creatividad y el proponer para limitar la inventiva de su adversario de turno, algo que le terminó dando resultado en gran parte del cotejo.
Y lo que no llegó en el primer tiempo, apareció en el comienzo del complemento, mediante Olmo, que recibió una asistencia de Yamal y culminó una gran jugada colectiva, anotando el 1 a 0 con el arco a su merced (51’).
Con más empuje que fútbol, Alemania empezó a cascotear a Unai Simón. Niclas Füllkrug le dio al palo y Havertz estuvo cerca de hacer un golazo, mientras que el tanto del empate llegó a los 89’, por una volea del ingresado Florian Wirtz, después de que la bajara Joshua Kimmich.
En el alargue, emotivo, como casi todo el partido, España sintió el golpe y predominó Alemania, que estuvo cerca de la victoria, pro perdonó.
A los 119’, a falta de un minuto, como había hecho antes el anfitrión, Olmo envió un centro preciso que encontró en la cabeza de Mikel Merino la respuesta a todos sus problemas: 2-1 y clasificación agónica, con Carvajal recibiendo una expulsión en el tiempo añadido para cortar un ataque.
La Paz/AEP