Auguró que con la medida el deportista buscará mejorar su rendimiento y sus marcas para acceder a la beca que compromete a más trabajo, esfuerzo y disciplina.
El exatleta boliviano Osvaldo Morejón, quien radica en México, donde se desempeña como médico del deporte, destacó y aplaudió el programa de Incentivo al Alto Rendimiento Sueño Bicentenario, que implementó el Gobierno nacional para mejorar el deporte en el país.
El maratonista fue uno de los que representó a Bolivia en los Juegos Olímpicos Los Ángeles 1984.
Auguró que con la medida el deportista buscará mejorar su rendimiento y sus marcas para acceder a la beca que compromete a más trabajo, esfuerzo y disciplina.
Pidió que en el proyecto se incluya a los entrenadores y que éstos opten por incrementar sus técnicas de preparación.
—Osvaldo, ¿cómo califica el proyecto de Incentivo al Alto Rendimiento Sueño Bicentenario?
—Es una medida acertada del Gobierno, porque va a estimular a todos los jóvenes deportistas a que trabajen más para un mayor rendimiento para que mejoren sus marcas.
La convocatoria es clara, está tipificado lo que debe hacer cada deportista aspirante a la beca; sin embargo, también debían involucrarse a las federaciones y las asociaciones deportivas, porque son las instituciones que llevan el ranking de todos sus atletas y en ese contexto debían postular las asociaciones y federaciones a sus representantes para darle un poco más de empuje.
En uno de los puntos indican que conformarán un grupo de especialistas que va a analizar las carpetas de los deportistas; por tanto no creo que haya problemas en la selección o nominación de quiénes se beneficiarán con el ofrecimiento importante que hace el Gobierno.
—¿Con el incentivo se mejorará el rendimiento?
—Eso es importante porque muchas veces, sobre todo en nuestro país son muy limitantes los ingresos económicos para que se puedan cumplir los diferentes objetivos. En la actualidad, el costo que debe gastar el deportista en su mantenimiento, ropa, zapatos y su uniforme es muy alto, ya no es como antes, porque te comprabas un tenis y lo usabas hasta que se rompa; en cambio hoy tiene cierto tiempo de uso y después hay que desechar, además cuesta muy caro y hay otros gastos de transporte, porque un atleta no se entrena alrededor de su casa, sino tiene que ir a terrenos apropiados de acuerdo al deporte que practica.
Es una forma de estimularlos y comprometerlos también a responder a las exigencias para mejorar. Los que aprovechen las becas estoy seguro que van a mejorar su rendimiento.
—¿Cómo ve que todos pueden acceder a la beca?, porque no hay discriminación
—Es otro hecho importantísimo. Como dice la convocatoria, habrá una comisión que va a seleccionar. Una de las cosas que hay que analizar con pinzas es que hay muy pocos entrenadores de cierto nivel. Hemos visto por la televisión y escuchado por la radio que siempre hay problemas entre el atleta y entrenador, entre otras cuestiones; entonces sería bueno también que en el incentivo se involucre a los entrenadores, porque son parte de un binomio. Si se expande a esas personas, la convocatoria sería formidable.
—¿Eso implica que los entrenadores se capaciten más y mejor?
—Totalmente. En la época que competí hemos tenido ayuda de entrenadores alemanes, que llegaron en las especialidades de velocidad y salto para preparar a los atletas de cara a los Bolivarianos, pero en mi especialidad que era maratón viajaron a Alemania o a otros países a tecnificarse. En mi caso, vine a México y pude prepararme con entrenadores de alto nivel. Sería bueno que seleccionen a entrenadores para becarlos a que asistan a cursos de perfeccionamiento sobre técnicas de preparar atletas.
El mismo deportista que busca mejorar quiere tener un entrenador de más nivel. Por ejemplo, la primera medalla de oro de Ecuador en los Juegos Olímpicos fue porque buscaron un entrenador foráneo y a lo que pudieron alcanzar es contratar a un colombiano, que les dio un buen resultado. Eso ocurre en la mayoría de los países.
Perú tuvo un buen desempeño en las pruebas de fondo porque contrató a un entrenador mexicano, que en su momento fue uno de los mejores maratonistas; entonces en el país también necesitamos de eso, aunque no dudo que en Bolivia haya profesionales capacitados. En mis tiempos había un entrenador, Carlos Torres, que era excelente para pruebas de vallas y saltos, tenía una gran capacidad y por eso sacó buenos atletas.
—¿El incentivo genera más interés en los nuevos talentos?
—Al margen del fútbol, otros deportes siguen siendo amateur, todavía no son profesionales porque no reciben ingresos altos en la parte económica, como ocurrió con nuestro atleta Héctor Garibay, que ganó en México y recibió un buen ingreso, para llegar a ese nivel la situación está muy difícil.
El deportista casi siempre va a estar en un nivel amateur porque lo que recibe no le da para vivir y cuando se retiran ya no saben qué hacer.
—¿Con qué otras medidas se puede mejorar el deporte?
—Se debe masificar el deporte, es lo más importante. Se debe organizar juegos nacionales estudiantiles, porque habrá material humano en las escuelas, colegios. Será más sencillo, porque cada unidad educativa tiene su entrenador que es el profesor de Educación Física, quien va a detectar más talentos y habrá más participación.
Es importante darle prioridad a eso, buscar más material humano y después de ello, con un entrenador de la especialidad, quien le va a dar forma a ese deportista, se habrá logrado el objetivo inicial. Son determinantes las fuerzas básicas.
Por ejemplo, cuando tenía 15 años viajé a un torneo sudamericano, pero a los 13, 14 años había campeonatos nacionales, viajar de Oruro a Cochabamba era un mérito grande para mí, ir a comer a un restaurante era algo imborrable, esas cosas son algo especial para los niños y jóvenes.
Por eso recomiendo organizar juegos estudiantiles, porque ahí vamos a encontrar nuevos talentos.
Estuve ligado al deporte en México como médico del deporte, esa es mi especialidad, lo que me permite trabajar con equipos. Me tocó ir a un torneo de novatos, de talentos, donde solamente puede participar una vez y acceder a una beca, pero ya no puede ir a un segundo torneo porque sería un atleta entrenado y ese tipo de eventos sirven para descubrir nuevos talentos.
—¿Cuánto tiempo se necesita para tener deportistas de alta competencia que puedan ilusionarnos con ganar medallas en torneos internacionales y Olimpiadas?
—El proceso es largo, no es inmediato. Tenemos un atleta de alto nivel que es Héctor Garibay, él creo viene practicando atletismo menos de cinco años, su rendimiento es formidable y se tiene que contar desde cuándo empezó porque para llegar al alto rendimiento se necesita un trabajo no menos de 10 años, por eso es importante iniciar a los 13, 14 años, para que luego continúen en el colegio, la universidad hasta llegar a un buen nivel.
El programa de apoyo, de incentivo, no puede ser temporal, sino tiene que ser permanente o de largo alcance. Un deportista desarrolla su nivel hasta cierto momento, se da cuenta que no da más y se retira. La beca debe ser renovable. Cada año debe haber otra selección. Si un atleta no respondió o mejoró en un año ya no puede seguir recibiendo el apoyo económico, así de simple. Lo mismo debe pasar con un entrenador.
La Paz/AEP