La industrialización de sectores estratégicos, como el litio y la construcción de plantas, es clave para fortalecer la economía boliviana, según el analista económico Martín Moreira.
En el marco de las próximas elecciones presidenciales, el analista económico Martín Moreira advirtió sobre los posibles efectos negativos de un gobierno liberal, que, según él, podría resultar en la privatización de empresas públicas y la eliminación de los bonos sociales que actualmente benefician a la población boliviana.
Moreira explicó que, bajo un gobierno liberal, todas las empresas públicas serían transferidas a manos privadas, lo que implicaría que el Estado ya no tendría participación en el aparato productivo del país.
“El Estado no produciría nada. Se recurriría a préstamos internacionales del Fondo Monetario Internacional, por alrededor de 15.000 millones de dólares. En lugar de priorizar el crecimiento económico, el gobierno se enfocaría en pagar la deuda externa”, señaló en entrevista con la red ATB.
El analista advirtió de que, bajo un gobierno liberal, podrían eliminarse los bonos y subsidios, lo que afectaría gravemente a muchas familias bolivianas.
De nuevo, políticos de la derecha han conformado una coalición para enfrentar al MAS-IPSP en las elecciones generales. Su plan electoral incluye reducir el gasto público —con propuestas similares al Decreto 21060 de 1985, que relocalizó a miles de trabajadores—, privatizar empresas y recurrir al FMI, buscando reeditar las estrategias de la vieja derecha.
En Bolivia, estas políticas fueron implementadas entre 1985 y 2006 por una coalición encabezada por el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) e integrada por partidos como ADN, MIR y NFR, entre otros.
Moreira enfatizó en que las políticas de ajuste estructural pondrían en riesgo estos beneficios sociales, incrementando la desigualdad y la pobreza en el país.
Ejemplificó cómo, en un contexto de ajuste económico, los precios de productos básicos como la gasolina y el diésel podrían aumentar aún más, lo que afectaría directamente el poder adquisitivo de los bolivianos.
Gobierno social
El analista también comparó lo que sucedería con un gobierno de enfoque social y de desarrollo. En su opinión, un gobierno que apueste por las empresas públicas y las políticas sociales seguirá con medidas como la bolivianización del sistema financiero y el fortalecimiento del aparato productivo nacional.
“Este tipo de gobierno prioriza el bienestar de la población, manteniendo un equilibrio entre la inversión pública en áreas productivas y sociales”, dijo Moreira.
En ese contexto, resaltó los avances del actual gobierno socialista de Luis Arce en la industrialización de sectores estratégicos como el litio, que, según él, son clave para fortalecer la economía boliviana y reducir la dependencia de las importaciones.
“El país sigue avanzando en la creación de plantas químicas básicas y en el desarrollo de la industria del litio, lo que nos permitirá generar productos que antes dependían de la importación, como insumos para la minería y la agroindustria”, explicó en relación a las 170 plantas industriales impulsadas bajo la gestión de Arce, la mayoría de las cuales serán inauguradas este año.
La Paz/AEP
