El director de la entidad detalló que estos grupos realizan carguíos repetitivos y reventa de combustible, afectando el abastecimiento regular.
La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) advirtió que clanes familiares están involucrados en un “contrabando interno” de diésel y gasolina, mediante carguíos repetitivos y reventa ilegal de combustible, situación que provoca sobredemanda, filas en surtidores y perjuicio a los usuarios que realmente lo requieren.
El director de la ANH, Joel Callau, señaló que YPFB despacha diariamente más de 8 millones de litros de diésel y 7,7 millones de litros de gasolina, superando la demanda normal de 7 millones de litros por producto. Sin embargo, el incremento de la demanda no corresponde al consumo real, sino a prácticas ilícitas que buscan acumular combustible para su reventa.
“Tenemos picos de sobredemanda claramente identificados que afectan al usuario que realmente lo requiere. Son vehículos que se dirigen a diferentes estaciones y realizan carguíos repetitivos para revender el combustible; esto constituye un contrabando interno”, explicó Callau.
En Cochabamba, la ANH allanó cuatro domicilios de un mismo clan familiar, encontrando más de 200 turriles con hasta 24.000 litros de combustible; mientras que en Santa Cruz se identificaron casos similares en estaciones de servicio, donde se utilizaba el trasvase de carburantes para acopiar.
Para frenar estas prácticas, la ANH implementó operativos con seguimiento de vehículos y dispositivos de radiofrecuencia, logrando que las filas en surtidores se reduzcan hasta en 75% en Cochabamba y 60% en Santa Cruz.
El director de la ANH, Joel Callau.
Según la autoridad, cerca de 20.000 vehículos han sido monitoreados por carguíos repetitivos y posibles irregularidades.
El director de la ANH enfatizó que las investigaciones incluyen la recopilación de informes mensuales enviados a instancias estatales, con el fin de que el Ministerio Público y otras entidades competentes determinen responsabilidades y sanciones contra quienes incurran en delitos de contrabando interno.
“Como Agencia Nacional de Hidrocarburos, elaboramos informes mensuales sobre la situación y coordinamos acciones con la Policía Boliviana, las Fuerzas Armadas y el Ministerio Público para sancionar los ilícitos en hidrocarburos”, afirmó Joel Callau, director de la ANH.
El funcionario resaltó que la agencia mantiene un control continuo de las estaciones de servicio, supervisando que los surtidores no exijan requisitos indebidos a los usuarios y que cualquier irregularidad sea reportada y sancionada.
Esta medida busca proteger al consumidor y asegurar que el combustible llegue de manera equitativa a quienes lo requieren.
Callau hizo un llamado a la conciencia ciudadana, solicitando a los transportistas, comerciantes y población en general, colaborar denunciando prácticas ilegales y evitando la compra de combustible acopiado o revendido, para que la distribución normal se mantenga en todo el territorio nacional.
Finalmente, el representante de la ANH reiteró que las estaciones de servicio no deben imponer requisitos adicionales a los usuarios, y que cualquier control sobre la venta de combustibles debe realizarse exclusivamente a través de la agencia, con la finalidad de proteger al consumidor y asegurar la correcta distribución de diésel y gasolina en todo el país.
La Agencia de Hidrocarburos garantiza GLP y coordina distribución de garrafas
La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) aseguró que el abastecimiento de Gas Licuado de Petróleo (GLP) en Bolivia se mantiene con normalidad y que no existe riesgo de desabastecimiento en el territorio nacional.
Según informó el director de esta entidad, Joel Callaú, las plantas de almacenaje cuentan con autonomía de hasta 10 días, lo que garantiza la continuidad del suministro a la población.
La autoridad señaló que se están coordinando acciones con Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) para el cambio y distribución de garrafas, asegurando que los hogares y sectores productivos reciban el combustible necesario sin interrupciones y con las medidas de seguridad correspondientes.
“La población puede tener la seguridad de que el abastecimiento de GLP está controlado y se realiza conforme a los volúmenes establecidos”, afirmó.
El titular de la ANH afirmó que cualquier comentario o especulación sobre posibles faltantes no refleja la situación real y enfatizó que los controles se realizan de manera continua para mantener la eficiencia en la distribución y garantizar que los usuarios reciban el suministro, según la demanda registrada.
Con estas medidas, la ANH busca reforzar la seguridad energética del país, mantener la estabilidad en el mercado interno y evitar cualquier tipo de especulación que pueda afectar a los consumidores.
AEP