Esta determinación promueve una participación activa e igualitaria de entidades bancarias y no bancarias y favorece la democratización de los servicios financieros.
El Banco Central de Bolivia (BCB) habilitó el uso de canales e instrumentos electrónicos de pago (IEP) para operaciones de compra y venta de activos virtuales que coadyuven al fortalecimiento de actividades financieras y comerciales en el país.
“La tres instituciones, el Banco Central de Bolivia, la ASFI (Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero) y la UIF (Unidad de Investigaciones Financieras), en este último periodo hicimos una evaluación del marco normativo a fin de buscar una mejor alternativa que viabilice la regulación en el sector financiero y que haga la prevención y luche contra la legitimación de ganancias ilícitas para las operaciones con activos virtuales”, dijo el presidente del BCB, Edwin Rojas.
Es así que, mediante la Resolución de Directorio 082/2024, del 25 de junio de 2024, se dejó sin efecto la Resolución de Directorio 144/2020, de 15 de diciembre de 2020, habilitando, de esta manera, el uso de canales e instrumentos electrónicos de pago (IEP) para operaciones de compra y venta de activos virtuales.
Esta decisión fue aplicada en consideración con la evaluación mutua del Estado Plurinacional de Bolivia 2023-2024 que hizo el Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (Gafilat), que entre una de las acciones recomendó considerar la regulación de los proveedores de servicios de activos virtuales (PSAV) conforme a la política pública que se defina en el contexto boliviano.
Se define a los activos virtuales como representaciones digitales de valor que pueden comercializarse o transferirse digitalmente y utilizarse para pagos o inversiones.
“El BCB, en el marco de sus políticas, ha impulsado continuamente la modernización del sistema de pagos nacional y el desarrollo de la infraestructura de pagos, viabilizando con sus acciones la adopción de innovaciones tecnológicas y nuevos esquemas de pago, constituyéndose en la actualidad en un referente regional en términos de interconexión, interoperabilidad e inclusión financiera digital”, puntualizó Rojas.
El ejecutivo explicó que con esta determinación se está promoviendo una participación activa e igualitaria de entidades bancarias y no bancarias, favoreciendo la democratización de los servicios financieros.
Al respecto, la directora de la ASFI, Ivette Espinoza, explicó que esta entidad hará el respectivo control de las entidades de intermediación financiera (EIF) en cuanto a los medios que éstas proporcionen para la adquisición de activos virtuales.
“La Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero brindará educación financiera para que la población conozca sobre los temas inherentes con relación a la compra de este tipo de activos”, precisó Espinoza.
La directora de la UIF, Pamela Troche, advirtió de que aplicará medidas preventivas para identificar posibles operaciones sospechosas vinculadas a legitimación de ganancias ilícitas y financiamiento del terrorismo.
Según el BCB, la única moneda de curso legal en el país es el boliviano, conforme a la Ley 901 del 28 de noviembre de 1986.
Por ello, un activo virtual no es una moneda de curso legal, no es efectivo y no existe obligación por parte de la población para recibirlos como medio de pago, por lo que los riesgos inherentes al uso y comercialización de los mismos serán asumidos por los usuarios de dichos activos.
