El viceministro Silva resaltó que la estatal llega a municipios alejados.
La función social con la que fue creada Emapa fue destacada ayer por el viceministro de Defensa del Consumidor, Jorge Silva, así como el apoyo de la estatal a los pequeños productores que no pueden comercializar sus productos en el sector privado.
“Emapa (Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos) cumple una función social muy valorada, especialmente en los sectores alejados (...). Emapa está en diferentes municipios alejados de los centros urbanos, donde las personas encuentran productos a precios justos”, sostuvo.
PRODUCCIÓN
Asimismo, Silva indicó que Emapa promueve a los pequeños productores en el país, que no pueden vender sus productos en el mercado privado.
“También Emapa cumple una función de apoyo a la producción, especialmente de los pequeños productores. Son más de 100 tiendas (101 en total) que tiene Emapa en todo el país, y no precisamente en las ciudades capitales, sino en municipios que están alejados de los centros urbanos”, apuntó.
Silva añadió que el sector privado sintió que Emapa es una competencia, debido a que la estatal pone un freno al incremento de precios.
“El aceite en el mercado privado estaba en 25 o 30 bolivianos; y en Emapa estaba a 11 bolivianos. Por eso la gente iba a hacer fila a Emapa, claro, no alcanzaba porque la demanda se disparó”, dijo.
Recordó que algo similar sucedió con el tema del arroz. Descartó que Emapa haga una competencia desleal a la “caserita”, sino una competencia a la industria y a los empresarios que no quieren la intervención del Estado. “Emapa es parte del Modelo Económico Social Comunitario Productivo, que no coincide con el modelo neoliberal que ahora se pretende implementar”.
AEP



