La entrega de harina a precio subvencionado tiene como fin estabilizar el costo del pan de batalla, una prioridad para el Gobierno.
El Gobierno nacional, a través de la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa), distribuyó hasta ahora un total de 1.524.235 quintales de harina de 50 kilos a los panificadores del país. Esta medida busca asegurar que el precio del pan de batalla, un alimento esencial en la canasta básica de los bolivianos, se mantenga en Bs 0,50.
El gerente de Emapa, Franklin Flores, destacó que esta distribución es parte de un convenio estratégico con la Confederación de Panificadores de Bolivia, que permitirá entregar en total 2,4 millones de quintales de harina durante 2024.
“Emapa tiene un convenio importante con la Confederación de Panificadores de Bolivia, a través del cual hemos entregado hasta la fecha 1.524.235 bolsas de 50 kilos”, informó Flores.
La entrega de harina a precio subvencionado tiene como fin estabilizar el costo del pan de batalla, una prioridad para el Gobierno.
Para garantizar el suministro de harina y cumplir con los compromisos acordados, Emapa anunció que comprará 60.000 toneladas de trigo de la estatal Insumos Bolivia. Este trigo será procesado en la Planta Procesadora de Cereales de Viacha, en el departamento de La Paz, para fortalecer la cadena de producción nacional y garantizar la disponibilidad de harina en los próximos meses.
El Ejecutivo reiteró el compromiso de Emapa de apoyar a los sectores productivos del país, especialmente a los vinculados a la producción de alimentos básicos.
Este esfuerzo se enmarca dentro de las políticas del Gobierno para garantizar la seguridad alimentaria y proteger a los consumidores de posibles incrementos en los precios, derivados de la volatilidad en los mercados internacionales de alimentos.
La Paz/AEP
