Bolivia tiene dos tipos de contrato con Brasil, una con Petrobras y otros de “corto plazo” con empresas privadas en función a sus requerimientos.
Brasil es un mercado seguro para el gas boliviano y garantiza la estabilidad de ingresos, afirmó el ministro de Hidrocarburos y Energías, Alejandro Gallardo.
“Con lo que producimos ahora y los posibles éxitos petroleros que tengamos, realmente tenemos un mercado asegurado en Brasil, que nos va a permitir garantizar la estabilidad de ingresos, sin importar cuál sea el mercado en el que estemos”, aseguró sin dar mayores detalles.
Gallardo acudió a la Cámara de Senados a explicar la importancia de la aprobación de la firma del contrato de servicios petroleros entre Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) yla Empresa Canacol Energy Colombia S.A.S. (Sucursal Bolivia), para trabajos de exploración y explotación en el área Tita Techi de Santa Cruz con $us 100 millones en inversión.
La presencia del ministro fue aprovechada por los legisladores para conocer la situación de Bolivia tras que Argentina dejara de comprar gas por la explotación de gas en Vaca Muerta.
“Ellos ya no requieren lo que es el gas boliviano, porque ya cuentan con reservas suficientes para el mercado interno, y, es más, es tan grande ese campo que también tienen volúmenes de exportación. Entonces, nadie va a comprar algo que ya no necesita”, explicó.
Antes de que se concluya este contrato, Bolivia y Argentina realizaron ampliaciones al suministro hasta que en ese país se concluya la habilitación de ductos para trasportar sus carburantes a los hogares del norte argentino.
Esta situación se concretó en septiembre y desde el lunes el país redireccionó el gas a Brasil, una de las naciones con mayor crecimiento de su Producto Interno Bruto (PIB) en la región.
“Realmente es muy grande (el mercado), el más grande de Latinoamérica. Entonces, ellos tienen requerimiento de diferentes tipos de energéticos, energía eléctrica, gas natural y otros para su sector doméstico, comercial e industrial”, explicó.
Bolivia tiene dos tipos de contrato con Brasil, una con Petrobras y otros de “corto plazo” con empresas privadas en función a sus requerimientos.
Lo bueno de estos contratos de corto plazo, según Gallardo, es que se puede acceder “con mejores precios, hacer contratos específicos con empresas privadas”.
“La normativa brasilera permite generar este tipo de contratos con empresas industriales o cualquier tipo de requerimiento que tengamos, y realizar negociaciones fuera de lo que es el mercado internacional, en cuanto a precios, y eso nos genera ingresos interesantes”, aseguró.
La Paz/ABI