La autoridad gubernamental explicó que la política de industrialización para sustituir importaciones, que encara Bolivia “es el camino correcto y esta metodología económica ya ha sido comprobada en otros países”.
Mediante esa tecnología, los servidores pueden comprar no sólo alimentos, sino también prendas de vestir, calzados, artesanía, cosméticos, artículos para el hogar, entre otros.