La Compañía de Jesús reafirmó su deber con la búsqueda de la verdad, justicia y reparación integral para las víctimas al cumplirse un año desde la publicación del diario español El País.
La Paz, 29 de abril de 2024 (AEP).- A un año de la denuncia del influyente diario español El País sobre los abusos sexuales cometidos por el sacerdote jesuita Alfonso Pedrajas contra decenas de niños en Bolivia, la búsqueda de justicia ha enfrentado obstáculos y avances limitados hasta el momento.
El 29 de abril de 2023, el periodista Julio Núñez publicó en la portada de El País su investigación titulada “Diario de un cura pederasta: ‘Hice daño a demasiados’”, que reconstruyó la historia de Pedrajas, apodado ‘Pica’, a partir de su propio testimonio escrito y entrevistas con víctimas y allegados.
La denuncia recorrió el mundo e indignó a los bolivianos porque es la primera vez que se muestra la mirada de los abusos y su encubrimiento por la Iglesia Católica, desde el otro lado, el del religioso agresor.
En su diario secreto, descubierto por su sobrino, Pedrajas admitió: “Hice daño a mucha gente (¿a 85?) a demasiados”.
Además expresó su temor ante las revelaciones de pederastia en la Iglesia. Sin embargo, hasta su muerte en 2009, gozó de una reputación intachable en Bolivia, donde trabajó durante décadas como educador en colegios católicos reconocidos.
A pesar de la gravedad de las acusaciones, la búsqueda de justicia ha enfrentado grandes obstáculos.
Si bien la Compañía de Jesús reafirmó su compromiso con la verdad y la reparación integral para las víctimas, hasta ahora no se han logrado avances significativos en el esclarecimiento de los hechos y la rendición de cuentas.
El 28 de marzo de 2024, la jueza de Instrucción contra la Violencia hacia la Mujer Nº 1 de Coña, en Cochabamba, ordenó la detención domiciliaria para dos sacerdotes de la Iglesia Católica Marcos Recolons (81) y Ramón Alaix (83) por el delito de encubrimiento de los casos de abuso sexual del padre ‘Pica’.
La medida cautelar también les prohíbe salir del país y tener contacto con las víctimas. No obstante, esta medida cautelar representa un paso modesto en el largo camino hacia la justicia, reclamaron las víctimas de un colegio de Cochabamba donde trabajó el sacerdote pederasta y la sociedad boliviana.
A un año de la denuncia, persisten las interrogantes sobre la magnitud de los crímenes cometidos por Pedrajas y la posible complicidad de autoridades eclesiásticas en el encubrimiento sistemático de los abusos.
La lentitud de los procesos judiciales y la falta de acciones contundentes por parte de la Iglesia Católica han generado frustración y desconfianza en las víctimas y la opinión pública, señalaron colectivos de mujeres y derechos humanos.
“ILUSTRE PICA”
El texto de Pedrajas no describe los abusos en detalle, pero el diario español lo hace con entrevistas a víctimas y allegados en Bolivia.
El religioso, dice en una de sus anotaciones: “Lo que ha llenado este tiempo ha sido el tema de los pederastas en la TV y la prensa. Algunos momentos los he pasado con enorme ansiedad. Me afectó todo: el sueño, el trabajo, las relaciones, la adicción, todo. Tengo miedo”.
Pica, en Bolivia, era famoso. Un diario paceño le dedicó un amplio perfil dominical en el que lo retrata como un hombre comprometido con la fe pero también como un religioso con “conciencia social”.
“Es un hombre de una grandeza de corazón increíble”. Así lo describieron en su momento políticos, religiosos, docentes universitarios y estudiantes en Bolivia. Los engañó a todos.
El diario paceño que escribió una suerte de alabanza de él dice: “Desde hace 10 diez años Pica se dedica a encauzar las vocaciones de los jóvenes hacia la Compañía de Jesús, en su función de coordinador de la pastoral vocacional. Y aunque a estas alturas ha cumplido suficientemente con su misión, Pica continúa en la gran dedicación de su vida desde las tres condiciones que lo califican: un educador intenso, creativo y audaz”.
Alfonso Pedrajas —con amplios estudios en humanidades, literatura, arte, historia, latín, griego, teología y filosofía— trabajó en Bolivia en las ciudades de Santa Cruz, Cochabamba, La Paz, El Alto y centros mineros de Potosí y Oruro.
Como educador pasó por aulas de famosos colegios católicos en los que proyectaba una imagen de un hombre “profundamente cristiano”, señalaba la publicación paceña tres lustros atrás.
El País de España inició en 2018 una investigación sobre la pederastia en la Iglesia Católica que destapó 953 casos, solo en España.
