Para Arce, el Gobierno tiene que “enfrentar a algunos otros enemigos, como aquellos que quieren arrebatar la democracia al pueblo boliviano”.
El presidente Luis Arce reafirmó su compromiso de defensa de la democracia y de enfrentar a “algunos otros enemigos” que tiene el interés de romper la institucionalidad, como ocurrió el miércoles 26 de junio con la asonada golpista fallida.
Arce fijó su posición ante una masiva presencia en Casa Grande del Pueblo de dirigentes y bases de organizaciones sociales de La Paz, quienes por su parte también comprometieron su apoyo en la defensa de la democracia y del gobierno legalmente constituido.
“Nosotros vamos a defender a como dé lugar la democracia de los bolivianos”, advirtió y recordó que en este desafío es central el apoyo ciudadano y en particular de las organizaciones sociales, como lo hicieron en 2019, cuando resistieron el golpe de Estado, y el 2020, cuando arrebataron al gobierno de facto de Jeanine Áñez la fecha de elecciones.
Este 26 de junio se vivió una fracasada intentona golpista, con la toma de la plaza Murillo, centro del poder político, por un contingente militar fuertemente armado y tanquetas con ametralladoras desplazados por mandos militares bajo el mando del excomandante del Ejército Juan José Zúñiga. Al momento fueron identificados y detenidos 21 involucrados.
Para Arce, el Gobierno tiene que “enfrentar a algunos otros enemigos, como aquellos que quieren arrebatar la democracia al pueblo boliviano”.
Tras la asonada golpista, fueron aprehendidas 21 personas, entre militares del servicio activo y pasivo, y civiles. Zúñiga fue trasladado el sábado al penal de El Abra, del departamento de Cochabamba, para cumplir detención preventiva por seis meses, acusado, como el resto, por los delitos de terrorismo y alzamiento armado contra la seguridad y soberanía del Estado.
La acción militar se preparaba desde mayo aproximadamente. El propio Zúñiga, en su declaración policial, reveló que el experto en planificación Aníbal Aguilar ya daba cursos desde mayo y le decía que “debía realizar un levantamiento” y tomar el poder.
Mirando a los centenares productores de La Paz en Casa Grande del Pueblo, quienes recibieron insumos para la producción, el presidente reafirmó el compromiso de defensa de la democracia y de industrializar el país.
“Lo único que está haciendo (el Gobierno) es trabajar, industrializar y reivindicar a nuestras organizaciones sociales. Y si es el precio que tenemos que pagar, estamos con gusto a pagar, hermanas y hermanos, aquí hemos venido a trabajar y a defender nuestra democracia”, enfatizó.
La Paz/ABI