Las Naciones Unidas para los Derechos Humanos sigue de cerca los últimos acontecimientos que enlutaron al país, dijo el alto comisionado.
Bolivia, a través de la Cancillería, ratificó su compromiso con la democracia y las elecciones generales del 17 de agosto, luego del llamado del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, que instó a preservar la integridad del proceso electoral y el Estado de derecho en el país.
“Estoy siguiendo de cerca los últimos acontecimientos en Bolivia. Debe preservarse la integridad electoral de cara a las elecciones en agosto. El diálogo y el respeto por el Estado de derecho deben prevalecer”, recomendó Volker Türk, alto comisionado de la ONU, durante su informe ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas.
COMPROMISO
Mediante un comunicado, la Cancillería del país respondió ante el llamado del alto comisionado, ratificando la voluntad del país de “garantizar procesos electorales libres, transparentes y en apego a la Constitución Política del Estado”. También su “determinación de resguardar la institucionalidad democrática frente a cualquier intento de vulnerarla mediante presiones, amenazas o hechos de violencia”.
La Cancillería agradeció el acompañamiento de la comunidad internacional y de los mecanismos multilaterales de derechos humanos, en particular, del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos y su oficina regional, en el esfuerzo compartido por fortalecer la democracia y por promover el respeto a los derechos fundamentales.
AMENAZA EVISTA
El llamado de preservar la integridad del proceso electoral de la ONU se da en medio de las medidas de protesta y la escalada de violencia que causaron seguidores del expresidente Morales durante 14 días de bloqueo, quienes amenazan, de manera abierta y pública, con parar los próximos comicios.
Para resguardar el proceso, los órganos del Estado, políticos y candidatos, además de la Fiscalía, se comprometieron a resguardar las elecciones en el Cuarto Encuentro Interinstitucional y Multipartidario por la Democracia.
Ante ello, la semana pasada, el presidente Luis Arce sostuvo una reunión virtual con el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, a quien expuso los “constantes” intentos de desestabilización que enfrenta Bolivia, así como los violentos bloqueos carreteros que lidera Evo Morales.
Durante el encuentro con Türk, el jefe de Estado denunció que el exmandatario insiste en la reelección como “derecho humano”, pese a que la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte-IDH) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) determinaron que tal derecho “no existe y nuestra propia Constitución lo impide”. Arce detalló que como resultado de estos bloqueos, el país lamentó la muerte de policías y civiles, además de personal de salud y otros.
CONDENA
Tras los hechos de violencia en Llallagua, Potosí, la CIDH y su RELE (Relatoría Especial para la Libertad de Expresión) condenaron la escalada de violencia durante las manifestaciones que iniciaron el 2 de junio por parte de evistas.
El mandatario destacó también el pronunciamiento de Jan Jarab, representante de ONU DDHH para América del Sur, quien recordó que las normas internacionales “no amparan a quienes incitan o ejercen violencia, especialmente cuando provocan lesiones o muertes”.
AEP