El analista económico Martín Moreira afirmó que Paz y Quiroga usan la confrontación para evitar hablar de las medidas de “shock” que ejecutarán en la economía.
A 28 días de la segunda vuelta, ven que se acrecenta la guerra sucia entre candidatos y se percibe un desencanto hacia Edmand Lara, del PDC, por sus declaraciones polémicas. El analista económico Martín Moreira afirmó que Rodrigo Paz y Tuto Quiroga, contrincantes para el balotaje, usan la confrontación para evitar hablar de las medidas de “shock” que ejecutarán en la economía a partir del 8 de noviembre.
El “acuerdo de paz” para evitar la “guerra sucia”, suscrito el 11 de este mes entre los candidatos del Partido Demócrata Cristiano (PDC) y de la Alianza Libre, no funciona. Es más, hasta ahora, Lara, aspirante a vicepresidente de Bolivia, aún no firmó dicho compromiso de no agresión, consideró el diputado del MAS-IPSP Zacarías Laura.
“Hemos visto que, pese al compromiso firmado, la guerra sucia continúa entre candidatos presidenciables y vicepresidenciables. Creemos que el Tribunal Supremo Electoral debe hacer cumplir ese acuerdo”, dijo el diputado.
Laura señaló que mientras los candidatos están en una “franca pelea”, la ciudadanía boliviana está preocupada por cómo Paz o Quiroga resolverán los problemas económicos, entre estos el combustible y el déficit de dólares, además de otros temas importantes.
“Les pedimos a los candidatos que dejen las peleas y de una vez hablen de las medidas económicas que aplicarán en el país”, recomendó el diputado.
Desencanto
El PDC, de Paz, fue considerado la sorpresa electoral en la primera vuelta de las elecciones nacionales, pues de la posición quinta, en la que lo ubicaban las encuestadoras, pasó al primero con más del 32% de apoyo del electorado en los comicios del 17 de agosto.
Lara, públicamente, se atribuyó la victoria; sin embargo, el analista José Llorenti ve que ahora existe un cierto “desencanto” de la ciudadanía, sobre todo del área rural, que lo apoyó por sus polémicas declaraciones, pero que en vez de dar certezas, generan “miedo”.
“Lara es la fortaleza y debilidad del binomio, comete errores y provoca miedo. Creo que hay un desencanto y creo que ahora está perdiendo votos (el PDC)”, dijo Llorenti en la red DTV.
El candidato a vicepresidente del PDC también genera desconfianza en sectores de El Alto, donde recibió un rotundo apoyo en los comicios de agosto, algo que podría cambiar este 19 de octubre.
El representante de la organización Wiphalas Insurgentes, Roberto Menacho, lamentó que el PDC haya declinado su participación en los debates electorales, a diferencia de lo que sucedía en la primera vuelta, cuando incluso Paz denunció discriminación por no ser invitado a foros de empresarios y otros.
“En El Alto y La Paz, ellos han recibido un rotundo apoyo, tal vez por eso se sienten ganadores, pero todo puede cambiar”, vaticinó.
Estrategia de mantener la “guera sucia”
Para el analista económico Martín Moreira, tanto Paz como Quiroga usan como estrategia la “guerra sucia” para no hablar sobre las verdaderas medidas de “shock” que aplicarán en el país, a partir del 8 de noviembre, fecha de asunción del nuevo gobierno.
“Creo que ninguno de los dos se sincera con el país, no quieren hablar de lo que realmente van a hacer en lo económico (...). Por eso es mejor mantener una guerra sucia que hablar de los efectos”, indicó Moreira a Ahora El Pueblo.
Lo cierto, en criterio del analista, es que ambos candidatos aplicarán medidas de “shock” drásticas, como levantar la subvención de combustibles, devaluar la moneda, lo que afectará a la economía de las familias. “Dicen que se viene un trago amargo para el país y eso es evidente, y ahí tenemos problemas serios, porque también dijeron que iban a mantener la subvención y los bonos, pero de dónde sacarán el dinero si van a privatizar las empresas”, cuestionó el analista.
AEP