Entre los ejes está profundizar la lucha de los movimientos sociales como protectores de la democracia y la defensa de la administración de Luis Arce.
Según la CSUTCB, la gran marcha que se celebró el viernes apunta a consolidar tres ejes: la unidad del pueblo; profundizar la lucha social por la democracia con la participación plena de los movimientos sociales; y la defensa del gobierno de Luis Arce.
En principio, el significado de esta movilización calificada de “histórica” y “del millón”, sienta las bases, en primer lugar, de la “unidad del pueblo” y que no se “dará paso” a un golpe del Ejército ni de la derecha, apuntó Efraín Mollo, secretario de Comunicación de la Confederación Sindical de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB).
“Lo primero que hay que destacar es que se sienta la unidad del pueblo boliviano que no va a permitir el paso del golpe por parte del Ejército ni de la derecha que pretende poner en zozobra el pueblo”, indicó el dirigente en entrevista con el canal Bolivia TV.
El segundo está relacionado a que el Estado Plurinacional se forjó a través de la Asamblea Constituyente, con la cual se buscó dejar lo colonial y republicano, para avanzar hacia un país democrático, de paz y productivo; pero este avance no fue suficiente, consideró el dirigente campesino.
De acuerdo con las organizaciones matrices de Bolivia, como la CSUTCB, cabeza del Pacto de Unidad, la marcha por la democracia y unidad apunta también a la profundización de la lucha social por la democracia en el país.
“A partir de la marcha creemos que debe haber un cambio en la política de la revolución democrática con una profundización de la lucha social y con mayor participación de los movimientos sociales”, señaló.
Para Bolivia, un país que vivió unos 40 golpes de Estado y varios intentos de ruptura constitucional registrados a lo largo de su historia, la democracia es considerada un patrimonio y un derecho que costó luto y dolor a los bolivianos.
Es más, el 26 de junio trajo a la memoria lo sucedido en 2019, cuando murieron más de 30 personas en las masacres de Senkata, El Alto, y Sacaba, Cochabamba, además de Pedregal de La Paz, en una clara línea del régimen de Jeanine Añez.
Defenderán la Gestión de Arce
Como tercer eje, la marcha apunta a que los movimientos sociales que se dieron cita el viernes “no permitirán la desestabilización del gobierno de Luis Arce” y defenderán su gestión de “quienes pretenden acortar su mandato, como Evo Morales y otros de la derecha, enemigos del Estado”, dijo.
La Paz/AEP
